Luis Bru.
Ayanta Barilli ha roto con Federico Jiménez Losantos. La que ha sido la amante oficial, según coinciden todas las fuentes, ha decidido romper con Losantos en un momento crítico para la viabilidad de la empresa Libertad Digital SA, cuando está pidiendo desesperadamente ayuda y donaciones a los oyentes y lectores.
No hay ninguna duda de que Ayanta Barilli mantienen una tórrida relación sexual ya desde los tiempos de la COPE, cuando empezó la relación preferencial del comunicador con la escritora. Como comentó Javier Rubio, es peligroso citar la relación de Ayanta con Losantos. Los escoltas han sido testigos, y así lo han declarado en cierto ámbitos de la empresa, de «estar hartos» de recoger preservativos de donde habían pasado la noche Ayanta y Losantos. Que la relación había traspasado los muros de Libertad Digital SA lo constató César Vidal cuando, en la Feria del Libro, una señora se dirigió a él diciéndole que «ahí está la novia de Federico». Losantos siempre se ha negado a dejar de pagarle las elevadas retribuciones que cobra Ayanta Barilli, 60.000 euros, por un programa que casi no tiene audiencia y menos a aceptar los consejos de quienes propugnaban que se autofinanciara de la publicidad.
Ayanta Barilli es una consumada especialista en sexo como dio buenas muestras en el programa nocturno para masturbadores compulsivos Es Sexo. Loosantos, por su parte, es un aficionado a Freud.
Ayanta Barilli, hija de Fernando Sánchez Dragó, ha tenido una presencia perturbadora en la vida interna de Libertad Digital SA. Se la responsabiliza de la salida de Javier Rubio al no satisfacer sus desmesuradas demandas para tener un programa en la fracasada televisión.
Losantos ha afirmado públicamente que duerme y hace vida aparte respecto a su esposa María Prado, que fue colocada por Esperanza Aguirre en la enseñanza pública. El matrimonio parece de ser conveniencia o abierto, aunque parece que ha tenido problemas psicoconyugales.
Ayanta Barilli empezó a distanciarse con el confinamiento por el coronavirus. Y según fuentes solventes internas de la empresa, se ha consumado la ruptura. Ayanta fue finalista en el Premio Planeta, en donde se embolsó 150.000 euros, lo que le ha dado autonomía económica y no necesita a Losantos, que, por el contrario, atraviesa una situación financiera angustiosa en su empresa que se encuentra abocada al cierre.