Enrique de Diego.
De repente, Mariano, todo el mundo te aplaude. No sólo los del Comité Ejecutivo del PP que te premiaron con un aplaudo cerrado al estilo del Politburó soviético. Sino los que enconados enemigos hasta el día anterior. Por supuesto, La Vanguardia del conde de Godó, al que habría que quitar el título porque lleva décadas demoliendo España en Cataluña a 700.000 euros de subvención al semestre, que es la punta del iceberg de ese pacto oscuro que has llevado a cabo con la atribulada burguesía separatista catalana. «Aplaudimos la decisión del presidente Rajoy«. ¿Por qué tanto aplauso? ¡Porque no has intervenido nada! Lo único que has hecho ha sido depurar a una cúpula de mindundis alocados que estaban poniendo todo patas arriba y poniendo en peligro las grandes fortunas.
No tenían para pagar la nómina de octubre
¿No te parece extraño, Mariano, tanto aplauso? Te voy a dar un dato que conoces bien y que, si andas despistado, lo puedes contrastar con Cristóbal Montoro, que se dispone a pasar la factura del entuerto a todos los españoles. ¡Estos pringaos sediciosos que andan pintándola por Bruselas no tenían para pagar la nómina de octubre! Así que se la vas a pagar tú, y por eso te aplauden. Ahora resulta que los del cava, que este año no estará en las mesas de los patriotas, ningún cava, porque se esconden detrás de los de otras regiones, se quedan y se les ha pasado el cangelo. Y todos te aplauden y los sediciosos de ayer no se explican por qué no has aplicado el artículo 155 antes. ¡Porque has aplicado un 155 de la señorita Pepis, de diseño! Como si con toda la casa en ruinas hubieras dado una mano de pintura a la fachada.
«Rajoy por una vez tuvo reflejos y actuó de manera audaz«. ¡Menudo elogio! Tú, que sientes instintiva aversión a la audacia; tú, que careces de reflejos y dejas pudrir los problemas hasta que hieden. ¿Quién te ha hecho un elogio tan redondo? ¿Acaso Xavier García Albiol o Inés Arrimadas, que, confundiendo los deseos con la realidad, ya se ve de presidenta de la Generalitat? No, quien ha dicho eso, en un mitin junto a Xavier Domenech, ha sido ¡Pablo Iglesias! Para quien eres el mismo diablo. De repente, Gürtel está pasando sin pena ni gloria y se difumina todo el tufo de la corrupción y la caja B, y eres «astuto» para El Periódico y «audaz» para Pablo Iglesias. Dos cosas que no eres, ni por asomo.
Nos has entregado a la «sedición legal»
Porque, sin el más mínimo patriotismo, de partida como el pagafantas de la secesión, empezando por la nómina de octubre y siguiendo por el nuevo modelo de financiación pactado en un tu pacto oscuro, has convertido un problema de sedición, de legitimitad, en un simple problema, de legalidad, y has caído en la trampa saducea y nos has entregado a la «sedición legal» y la «conjura de Roures«. ¡Y lo vamos a pagar todos muy caro! Tú con tal de seguir unos meses más en el cargo, con tal de que los del PNV te voten los Presupuestos, con tal de que Ángela Merkel te dé unas palmaditas en la espalda –Mario Draghi, no, que ha recortado la compra de deuda a la mitad- hasta entregado a España.
Comprendo los sentimientos alegres de los patriotas viendo la diarrea de Carles Puigdemont y de esta pandilla de mindundis prepotentes que han escrito y están escribiendo un tebeo en vez de una página de la Historia, pero es preciso dar la voz de alarma: ¡el peligro no ha pasado, ahora es cuando es más inquietante! ¡Patriotas, alerta! Rambla Libre no tiene ningún problema, por la Patria, en ocupar el papel de centinela. Ya van chupando rueda otros: que está todo pactado, que se ha entregado la llave de la gobernabilidad a Ada Colau, que o bien se repite un tripartito separatista o uno de izquierdas (ERC, PSC y Comunes), que es por lo que te aplaude Pablo Iglesias, que se ha actuado con precipitación, que se deja viva y coleando a la totalitaria escuela catalana, que a la Terribas no se la va a encontrar nadie en pie sino con sus posaderas en la poltrona y con su sucia lengua con el micrófono abierto. ¡Qué todo es una farsa!
Has pasado, Mariano, días de pánico y congoja, como no te habían visto tus serviles pretorianos. Y has caído en la trampa. ¡Nos has entregado con armas y bagajes! Has entregado a todos esos patriotas que, gallardamente, sin otro interés que la Patria en peligro, se han echado a la calle con la entrañable bandera rojigualda, a los que han sacado nuestra enseña a los balcones de su casa en floración patriótica, a todos esos policías y guardias civiles a los que has hacinado en los ferrys, a los que echaron de Calella. Eres un cobarde y un traidor y tú vas a ser el primero que lo pague.
¡Lo labrado en cuatro décadas de ingeniería social no se resuelve en dos meses! Con unas elecciones que van a empeorar las cosas, y por eso Carles Puigdemont te reta desde Bruselas y por eso Pablo Iglesias, al que no le llegaba el agua al cuello con su traidor grito de «Visca Catalunya libre y soberana» se ha convertido en marianista. Y resurge el exconseller Santiago Vila, otro de los que salvas en el pacto oscuro, hablando de independencia legal. Y Pablo Iglesias sueña -ese es el nudo gordiano de la conjura de Jaume Roures– con infectar a todo el PSOE a través del PSC con un gobierno de izquierdas. Y la CUP no se echa al monte, como te prometieron los multimillonarios catalanes, sino que concurrirá a las malhadadas elecciones del 21 de diciembre.
Las fichas del ajedrez se están moviendo para dar jaque mate a la Patria
Los patriotas, que disfrutan del triunfo efímero, de la victoria pírrica, asumen la consigna de que si se movilizan pueden ganar; de que el problema hasta ahora es que ellos no se han movilizado; no que el Estado ha ido desapareciendo de Cataluña y tú has prometido que lo harás desaparecer del todo, a cambio de unos meses, quizás un año de tranquilidad en La Moncloa.
Las fichas del ajedrez se están moviendo para dar el jaque mate a la Patria. Esa reforma de la Constitución para declarar España esa idiotez de nación de naciones, esa canallada infame y desquiciada de la plurinacionalidad, que tú has legitimado dándola carta de naturaleza a cambio del apoyo de un PSOE al que no necesitabas, con mayoría absoluta del PP en el Senado, y que tenía que seguirte por la senda del artículo 155 quisiera o no o desaparecía por el sumidero de la Historia. Has entregado pertrechos, Mariano, que no tenías que entregar. Tenías a toda la nación detrás. Por primera vez, desde hace tiempo, España era una piña y tú la has entregado por la trastienda.
No, Mariano, no hay una sedición legal. No, Mariano, el cava se va a quedar en las barricas estas navidades, porque el boicot es un acto de soberanía. No, Mariano, nos llevaremos por delante a CaixaBank y al Banco de Sabadell. No, Mariano, los multimillonarios separatistas no se van a salir con la suya. Aquí está Rambla Libre para, contra viento y marea, contra silencios cómplices, contra todo el imperio de la mentira, para gritar la verdad a los cuatro vientos: ¡Españoles, alerta contra el pacto oscuro!
El 21 de diciembre es la gran trampa en la que has caído. La factura de todos los vidrios rotos encima Cristóbal Montoro la quiere endosar a todos los españoles, que ya van a pagar en octubre la nómina de la Terribas y todos los funcionarios sediciosos. ¡Asco, inmenso asco, ante tanta traición y tanta podredumbre!
Si no rectificas el rumbo hacia los arrecifes, Mariano, las alabanzas de hoy -debería ponerte en guardia que te elogien tanto los enemigos de España- se trocaron en burlas y recriminaciones; te llevarás por delante al Partido Popular -si Cristina Cifuentes no lo remedia- y cosecharás el desprecio unánime y total de los patriotas. Attende tibi.
Escándalo: Todo sobre el pacto oscuro de Mariano Rajoy con la burguesía separatista