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Letizia pierde los nervios: quiere prescindir de sus escoltas de Guardia Civil y recurrir a escolta privada

Redacción




Según publica El Confidencial Digital: Desde febrero de 1979, los escoltas de la Casa del Rey velan por la seguridad de sus integrantes: Felipe VI y su familia. El Servicio de Seguridad de La Zarzuela – que integra a la Guardia Real y a escoltas pertenecientes a las fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado – se creó con el fin de ser el máximo responsable de la seguridad inmediata de la familia real.

Esa seguridad próxima, mediante escoltas, que cuidan de su protección inmediata en actos y desplazamientos, corre a cargo de miembros de la Guardia Civil. Dentro de La Zarzuela, la Guardia Civil integra el grupo de apoyo (con especialidad en motoristas), el grupo de escoltas (escalón próximo de seguridad inmediata), y el grupo de control y sistemas de seguridad.

Los escoltas del rey y su familia van a su lado vestidos de paisano, con traje oscuro y llevando aparatos de comunicación auricular que los mantiene comunicados al mando y entre ellos.

Una selección muy exigente 

Son objeto de una exigente selección y de un cuidadoso entrenamiento.

Tienen que ser miembros de la Guardia Civil jóvenes (el tope máximo de edad para ingresar es de 38 años), a los que se valora por nivel de idiomas, conocimientos de informática, electrónica y cursos de especialización de la Guardia Civil, Fuerzas Armadas y civiles relacionados con el servicio a prestar: protección de personas, tiro, defensa personal, conducción, etc.

Según ha sabido Monarquía Confidencial, de fuentes con acceso habitual a La Zarzuela, existe un conflicto en materia de seguridad debido a que Doña Letizia ha dejado ver, en más de una ocasión, que no quiere a su lado agentes de la Guardia Civil. 

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La reina ha comentado en más de una ocasión, y así le han escuchado en su entorno, que desearía que quienes le escolten sean personas de condición civil, no militar como es el caso de los miembros de la Guardia Civil, un cuerpo de naturaleza castrense. 

Entre los requisitos físicos figuran los siguientes:

– Velocidad de reacción: Partiendo de posición de tendido prono, con brazos en cruz, al toque de silbato, levantarse y correr 20 metros en cinco segundos y medio, hombres y sus segundos y medio (mujeres).

– Resistencia: Carrera de 1.000 metros en 4 minutos y diez segundos; hombres y cuatro minutos y 35 segundos en mujeres.

Muestras de rechazo

Letizia ha dado en más de una ocasión, muestras de distancia, y aun rechazo, hacia los miembros de la Guardia Civil que se ocupan de la seguridad inmediata. Una situación que está generando tensión entre los escoltas.

La reina visualiza un encontronazo con uhh escolta durante una visita a Sevilla. Cuando, al salir del coche oficial, se acercó a saludar al público que le aplaudía, tropezó con un escalón. Se dirigió al escolta con un tono tajante: «No me has avisado».

El momento fue grabado en vídeo y se hizo viral, con lo que se registró un cierto debate público sobre las formas de la reina y cómo se enfrenta a según qué situaciones. 

Fotografía por la espalda y cese

Otro momento conflictivo se produjo fue cuando los reyes acudieron en Madrid, junto a sus hijas la princesa Leonor y la infanta Sofía, a un concierto del violinista Ara Malikian. 

Una mujer les fotografió por la espalda y subió la imagen a las redes sociales. Doña Letizia achacó este suceso a un fallo de seguridad cometido por un escolta, que fue apartado  del servicio a petición suya.

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Según las fuentes consultadas, no se trata de hechos aislados, sino que son continuas las muestras de desagrado.

Controlando a los funcionarios

La llegada al trono de Felipe VI ha supuesto cambios en la forma de trabajar dentro de La Zarzuela. Don Juan Carlos Doña Sofía dejaban margen a los funcionarios de palacio sin mayores injerencias. No ocurre así ahora, con Doña Letizia, que tiene obsesión por controlar hasta el más mínimo detalle que la rodea. 

Entre las anécdotas que se cuentan de ella hay una que refleja bien su carácter. En el recinto de La Zarzuela se izaba y bajaba bandera diariamente, con los honores correspondientes, incluyendo el toque de corneta. Doña Letizia impuso su voluntad, y ahora se realiza el izado una vez al mes.