AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños


Federico Jiménez Losantos gorronea a César Vidal

Redacción




Reproducimos a continuación un capítulo del libro «La gran traición», del que es autor Enrique de Diego, a la venta en Amazon, en el que se cuentan las miserias y traiciones de Losantos contra el gran César Vidal, que motivaron la salida de éste de Es Radio y Libertad Digital:

Federico Jiménez Losantos es humano, demasiado humano. Tras dudar durante mucho tiempo donde tenía puesto su corazón, quienes le han tratado han descubierto que lo tenía puesto en sí mismo. Es un hombre de numerosos vicios y bastantes mezquindades. Dado a mentir en las cuestiones que le conciernen o en las que tiene interés, sus reflexiones biográficas han de ser cotejadas escrupulosamente pues se autoconcede márgenes muy amplios para la fabulación y el engaño. Es un personaje que reverencia al poder, cuando puede obtener beneficio, y ama el dinero como un avaro de novela de Charles Dickens.

Losantos puede ser cruel hasta el extremo hasta incurrir en la demolición personal cuando se considera agraviado por personas que lo han tenido como amigo –un error demasiado frecuente, pues el turolense está incapacitado para la amistad- y que no pueden responderle o dañarle en sus intereses. Entonces actúa como un tirano condenando al exilio al infortunado. Es el caso de Javier Rubio, amigo desde la juventud, quien puso en marcha e hizo Libertad Digital, que fue fulminado sin la más mínima explicación, porque en su camino se cruzó Ayanta Barilli, que en esta historia tiene un papel entre oscuro y estelar, que será tratado, en sabrosa profundidad, en futuras entregas. O el cultivado, afable e inolvidable Germán Yanke, con el que, en comandita con Esperanza Aguirre, se portó como un cochero.

Pero cuando se trata de alguien poderoso, Losantos tiene un alma calculadora, servil e interesada. La traición de Esperanza Aguirre, Eduardo Zaplana, Ángel Acebes en el juicio de la denuncia de Alberto Ruiz Gallardón fue rápidamente pasada por alto por la sencilla razón de que podían darle licencias. Y se las dieron. Losantos tiene un precio.

NO TE LO PIERDAS:   “La gran traición”: Elogio a César Vidal deconstruyendo a Jiménez Losantos
Federico Jiménez Losanos y Cesar Vidal, firmando en Pozuelo de Alarcón.

Esa doble vara de medir en las relaciones humanas es constante: Losantos tiene un alma de bufón y de lacayo que se arrastra ante los poderosos. Pedro J Ramírez no se fue a Es.Radio porque la COPE le interesaba más, pero, en ese caso, Losantos no se lo tuvo en cuenta, porque le interesaba y porque Pedro J le pagaba muy bien, espléndidamente, sus columnas en El Mundo. Y Losantos liba cualquier sacrificio en el ara del becerro de oro. En otras palabras, la relación se mantendrá si Federico Jiménez Losantos espera sacar algo de ella, pero no si eras sólo un amigo de años. Es para reflexionar.

Durante años, en casi toda la etapa de la COPE y en la puesta en marcha de Es.Radio, para la opinión pública Federico Jiménez Losantos y César Vidal constituían una pareja profesional muy bien avenida. Y, en efecto, hubo muchos buenos momentos porque la etapa de enfrentamiento con José Luis Rodríguez Zapatero en la COPE resultó emocionante. Firmas conjuntas en la Feria del Libro cuando le plantaron cara a ZP, ocasiones en que coincidieron en Miami y salieron a comer con la familia. Recuerdos seguramente gratos para César Vidal que es persona incapaz de abrigar resentimientos. Losantos puede ser bastante agradable en algunos momentos y, especialmente, si busca algo y César Vidal, hasta la bonhomía y la ingenuidad, siempre ha sido muy amigo de sus amigos, hasta ese gesto heroico de no aceptar renovar por dos años en la COPE y seguir a Losantos a Es.Radio, en lo que el turolense siempre ha considerado un exilio lacerante y penoso tras la salida abrupta del edén. Todas las vidas paralelas de quienes se han acercado a Losantos coinciden en que es incapaz de tener un amigo de verdad y de no utilizar a los demás para sus planes.

NO TE LO PIERDAS:   Carta al pozo de mierda Rafa Nadal: Eres el recogepelotas y el lame culos de Bill Gates
César Vidal con Federico Jiménez Losantos. /Foto: libertadigital.com.

Cuando alguien no le interesa, cuando todo el jugo ha sido exprimido, cuando la relación se ha roto, cuando alguien ejerce su libertad, Losantos tiende a actuar como un totalitario, como un pequeño Stalin y al igual que el genocida georgiano que borraba de las fotos históricas a quienes habían caído en desgracia, como Trotsky o Zamenev, el nombre de César Vidal fue borrado de la página de Es.Radio, su foto de la galería de fundadores arrancada, como si nunca hubiera existido.

Cosas del pequeño Stalin que Losantos lleva dentro y el concepto pequeño es el que más saca de quicio al turolense, como la vez en que Amando de Miguel, de tertulia amigable tras un programa de La Linterna, trató de alabarle encomiando que eso ya lo había anunciado “¡el pequeño Federico!”. La mirada de Losantos fue taladrante, el gesto, hosco, el silencio, espeso. A Federico no le gusta nada que se ironice con su liviana estatura.

Y César Vidal sí ha existido, ¡vaya si ha existido!. Quedan huellas, trazas indelebles. Están cuatro libros sobre Historia de España que aparecen firmados conjuntamente por César Vidal, una referencia de sólido prestigio como historiador, y Federico Jiménez Losantos, un diletante juntaletras. Losantos nunca escribió esos libros. No aportó más que un capítulo de relleno y autojustificación que siempre entregaba tarde y mal, con meses de retraso para desesperación de la agente de César Vidal. “Creo que es muy injusto porque tú haces todo el trabajo y él entrega el suyo encima con retraso”, se quejó amargamente la agente.

En lo que no tuvo empacho Losantos fue en ponerse el primero en la ventanilla para cobrar el 50% de los derechos de autor. Un ejercicio de vileza y de aprovechamiento de la amistad.

http://ramblalibre.com/2019/01/22/el-crepusculo-de-losantos-3-ahora-que-se-ha-ido-cesar-vidal-es-mas-facil-que-vuelva-a-la-cope/