Enrique de Diego.
Eres una choriza, eres escoria, eres la más corrupta entre todos los corruptos. En Alemania, donde fuiste una comisionista ministra de Defensa borraste todos los mensajes de tu móvil con las empresas armamentísticas a las que le pasabas la gorra, pero has superado todos los límites con la plandemia con la que habéis atacado a todas las poblaciones de la Unión Europea, provocando un genocidio en marcha, borrando todos los mensajes con el maldito CEO de Pfizer, Albert Bourla. Además del sangrante conflicto de intereses con tu esposo, directivo de farmacéutica.
Has dicho, Ursula, que «debemos estar todos preparados para la peor situación con el gas» y has advertido del riesgo de nuevos cortes de suministro por parte de Rusia y celebra el acuerdo «sin precedentes» de los Veintisiete para hacer frente a la presión con el control del gas de Moscú. Sin precedentes cuando todos los gobiernos están deslegitimados de ejercicio y cierran filas ante el derrocamiento que vienen, y miran, asustados, a la madre nutricia que eres tú. ¿No ibais a convertir en un «paria» a Putin? ¿No lo teníais todo controlado con gas licuado de demente Biden? ¡Todo era mentira!
Elemental, Ursula, tonta del bote: Gazprom anunció días atrás el recorte a la mitad del volumen de gas ruso que estaban bombeando a Eruopa a través del Nord Stream 1, que ya estaba reducido al 40% de su capacidad, y hace unosdías mismo supimos que Letonia se ha quedado sin suministro.
Dice el maestro Jesús Cacho que «los burócratas de Bruselas, aterrorizados ante el pedrisco que viene, no han tenido mejor idea que anunciar un recorte del consumo de gas del 15% a prorratear entre los socios. Un shock de oferta semejante provoca un encarecimiento automático de todos los imputs industriales, fenómeno agravado por la necesidad de una política monetaria muy restrictiva encaminada a combatir una inflación que parece fuera de control. El corolario es una notable pérdida de poder adquisitivo en la doble vertiente de familias y empresas».
Aquí, este Gobierno de impresentables, que tiene una ministra de un Ministerio inútil y de cachondeo que se llama de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha recordado que la situación «es crítica» y en cualquier momento se puede producir un corte de gas procedente de Rusia. «Europa necesita nuestra ayuda. Es momento de ser solidarios«. ¡Solidaridad, cuantos crímenes se cometen en tu nombre, cuántos desatinos, cuántos robos, latrocinios y expolios! Desde las 10 de la noche, luces apagadas, escaparates, como si estuviéramos en guerra.
En guerra ¿por qué? Por el Donbass. ¿Por quién? ¡Por Ucrania, cloaca de los globalistas, la patria de Femen y la maternidad subrogada! Y por el nuevo santo laico de pasta flora Volodimir Zelenski, que tú has ido en peregrinación a ver a ese mindundi, fantoche, pero al común de los mortales le podemos ver en la portada de Vogue, con su primera dama de pacotilla, suprema frivolidad del bisexual macarra. ¡Menudo ridículo patético el de nuestros parlamentarios, sin excepción, aplaudiendo a rabiar a ese fantasma!
Esta es una crisis provocada, por ti, Ursula, y por todos los criminales ganapanes que desgobiernan las naciones del viejo continente. Aquí van a pasar cosas, la gente se está hartando y no se va a quedar parada. Cabalgamos hacia una recesión que va a hacer el otoño muy caliente, el invierno largo y muy gélido y en primavera florecerás las guillotinas. Los grandes acontecimientos históricos suceden, tras cargarse el ambiente de negros presagios, de imprevisto, cambian de la noche a la mañana. La toma de La Bastilla, el 14 de julio, cogió a todo el mundo desprevenido, como el Boston tea party, como el 2 de mayo. Ya vas a tener que lidiar, escoria, que querías imponer la timo vacunación masiva y eterna en toda Europa, y el pasaporte covid totalitario también en toda Europa, con tu cara avejentada, no se nos olvida, y querías que quien no lo tuviera no pudiera viajar, ni tener trabajo, ni existir, no se nos va a olvidar nunca. Ya vas a tener que lidiar desde el 25 de septiembre con un Gobierno italiano euroescético, en octubre con una huelga general en España, que ya se estaba haciendo esperar, con el mindundi de Pedro Sanchinflas, con los agricultores holandeses, a quienes queréis herir con vuestras paridas de timo climático, y los alemanes y los italianos.
Se va armando una tormenta descomunal, una tormenta perfecta contra los globalistas, contra ti, maldita lacaya globalista. Las cosas cambian de la noche a la mañana y los estallidos sociales, las jornadas de antorchas y horcas, restallan como el relámpago. Vas a ser la enterradora de la Unión Europea, en tu mediocridad, ese es el deslucido papel que vas a tener en la historia; y te vas a llevar por delante esa mierda de ciudad que es Bruselas, mitad pederasta, mitad integrista.
Tú eres culpable del mal que nos has infringido y del mal que se avecina, del hambre y la ruina, de las ciudades apagadas que nadie bombardea, y no te vas a ir de rositas, ninguno os vais a ir de rositas.
Otoño muy caliente, un largo y gélido invierno pero en primavera florecerán las guillotinas. Estás avisado, maldita Ursula. Tus días de gloria han pasado.
Ursula von der Leyden propone que la UE lidere la “vacunación” obligatoria