Luis Bru.
Se ha beneficiado de la omertá y de una extraña solidaridad cómplice de la profesión periodística, de forma que sigue teniendo una columna en El Mundo, pero Luis María Anson merece un juicio público, similar al de Plácido Domingo, como acosador sexual utilizando, igualmente que el tenor, su posición de poder, tanto en la redacción de Abc como en las finales de Miss España, donde comparecía como jurado.
La periodista Elisa Beni se refirió a este caso, pero sin citar el nombre, en La Sexta Noche. A propósito de Plácido Domingo, puso sobre el tapete uno de los casos más clamorosos de depredador sexual, el de Luis María Ansón. Se preguntó la Beni con más razón que una santa: “¿Aquí no se sabía que en un periódico muy señero de este país había un director que le tocaba el culo a toda señora que pasaba por ahí? Pues claro que se sabía”.
Todos los días inevitablemente, antes del Consejo de Redacción, pasaba Luis María Ansón tocando diversas partes del cuerpo a las redactoras sin su consentimiento. Famoso era el juego de taparle los ojos a la redactora de turno y preguntarle: ‘bonita, ¿a quién no sabes quién soy?’. Un grupo de redactoras corajudas salían huyendo a esconderse en los servicios mientras pasaba el metemano. Incluso una redactora, Matilde Hermida, escribió una carta a Luis María Ansón protestando y exigiendo que a ella la dejara en paz. Todo se hacía con el conocimiento de Catalina Luca de Tena y una de las más agraciadas era Blanca Beratasegui.
Elisa Beni se enfrentó con José Luis Roig que le recriminaba que llamara depredador a Plácido Domingo. “¿Cómo quieres que le llamemos entonces? ¿Baboso?” Y se preguntó: “¿Qué hacían ellos, quienes le contrataban, cuando sabían que era un depredador? Se callaban”.
Plácido Domingo está acusado de acosar sexualmente a 27 mujeres, en el caso de Luis María Ansón o Anson son cientos, porque el mismo comportamiento tuvo en la agencia Efe. Es decir, abuso de su posición de poder, porque las redactoras temían ser despedidas si denunciaban los hechos, además de que en España estaba bien visto, los famosos estándares de los que habla Plácido Domingo. Luis María Anson, reprimido y depredador, por su forma taimada de meter mano, por las zonas erógenas del cuerpo, resultaba muy molesto por el carácter constante de los tocamientos. Baboso en extremo, también utilizaba el huecograbado para repetir favores a cantantes y folclóricas a cambio de presuntamente favores sexuales. Su comportamiento en los certámenes de Miss España era intolerable y escandaloso.
Estos últimos meses el sindicato estadounidense que representa a los artistas de ópera (American Guild of Muscial Artists), ha realizado una investigación sobre las acusaciones contra Plácido Domingo que ha concluido que el tenor acosó sexualmente a 27 mujeres cuando ocupaba la dirección de la Ópera Nacional de Washington y la de Los Ángeles.
Los abogados contratados por el sindicato determinaron un claro patrón de conducta sexual inapropiada y abuso de poder por parte de Domingo durante al menos dos décadas.
Para llegar a estas conclusiones, entre el pasado mes de septiembre y finales de diciembre, los abogados entrevistaron a 55 personas. 27 dijeron haber experimentado o presenciado un comportamiento sexualmente inapropiado por parte de Domingo en los años noventa y 2000 y otras 12 dijeron que estaban al tanto de la reputación de la estrella y que era algo público en las compañías.
Las acusaciones incluyen contacto físico no solicitado, como besos en la boca y llamadas telefónicas en las que Domingo pedía a las mujeres que fueran a su residencia o las invitaba a salir con él con tanta persistencia que algunas sintieron que estaban siendo acosadas.