Enrique de Diego.
La monarquía inútil y corrupta debe ser investigada ante las graves evidencias y la internacionalización del escándalo. Momentáneamente la solicitud de una Comisión de Investigación parlamentaria sobre las actuaciones financieras de Juan Carlos de Borbón relacionadas con el AVE de la Meca, y la donación generosa de 65 millones a Corinna y su hijo, y un total de 100 millones de mordida dada por el rey de Arabia Saudí, ha sido presentada por Compromís y Esquerra Republicana de Cataluña, y respaldada por Unidas Podemos.
El PSOE se ha negado y ha rechazado la iniciativa a pesar de los datos, y del escándalo internacional, con Le Point llevando el tema a portada, según la lógica dinástica de que el monarca es impune, se supone que no para delinquir en gran escala y de manera sistemática. El PSOE, garante de la transición y de la monarquía corrupta, sale así a defender lo indefendible, y convoca la comisión de seguimiento del pacto, se supone que por las disputas de la Ley de Libertad Sexual, pero también por la monarquía que les estalla a los socialistas en las manos. La derecha, o las tres derechas, se mantienen en silencio lacayo. Incomprensible.
Lleva razón el diputado de Compromís, Joan Baldoví de que es precisa la transparencia si se quiere defender la institución monárquica, sólo que ésta no aguanta la luz y taquígrafos. Según El Diario, «la empresaria alemana Corinna Larsen, con la que Juan Carlos I mantuvo una relación extramatrimonial, denunciará ante la justicia británica al monarca emérito por el acoso que asegura sufre desde su ruptura en 2012 y que estaría destinado a evitar que revele los «secretos de Estado» que presuntamente tiene en su poder. Un portavoz ha trasladado este jueves a eldiario.es que Larsen emprenderá «acciones legales» que afectan a Juan Carlos I y otros presuntos implicados». Es un paso en la internacionalización del escándalo. La Fiscalía Anticorrupción pide datos a la Fiscalía de Suiza sobre los 100.000 millones ingresados por una Fundación tapadera del Borbón. Esta vez va a ser difícil de parar el escándalo.
La corrupción como la putrefacción en los peces empieza por la cabeza y la corrupción de Juan Carlos de Borbón ha sido tan constante y tan llamativa que ha terminado corrompiendo a todo el tejido social. El primer encausado en caso Noòs debía haber sido Juan Carlos, el gran corruptor de Iñaki Urdangarín, al que facilita los contactos, mantiene reuniones en Zarzuela. El problema añadido de los corruptos es que se dedican a perseguir a los honrados y se ha llegado a la grave contradicción de que el fiscal acusa, sin fundamento, a Miguel Bernad, secretario general de la benemérita Manos Limpias, de extorsionar a la familia real, que es un pozo de mierda y de inmundicia.
La corrupción de Juan Carlos viene de largo, es fundacional, desde el 25 de noviembre de 1975 cuando se le proclama rey. Ese mismo día un grupo de notables monárquicos, reunidos en el despacho de José María de Areilza, deciden que Juan Carlos se lucre del tráfico de hidrocarburos con sus «hermanos» los monarcas de las petromonarquías. Luego vino Manuel Prado y Colón de Carvajal, la carta al sha de Persia pidiendo financiación para la UCD, el partido del monarca, los sablazos del monarca a los empresarios, el escándalo KIO por el que el monarca les vendió a los kuwaitíes que era necesario corromper a los políticos españoles para que permitieran utilizar las bases norteamericanas en la guerra del Golfo y un sinfín de sirvengonzonerías, porque Juan Carlos se ha tomado la inviolabilidad del rey en sentido estricto y laxo, y necesita dinero para sus numerosas amantes, como Bárbara Rey cuyo silencio hubo que comprar con el CNI, en la desmerecida función -literal- de mamporrero del Borbón.
Todo esto que era un secreto a voces lo escribió muy bien, con pelos y señales, el maestro Jesús Cacho, en «El negocio de la libertad», pero quedo tan tocado que cuando le hice ver que hacía falta un libro directamente sobre la corrupción personal de Juan Carlos, se negó. Me tocó escribir a mí «La monarquía inútil», que el día que salió Julio Ariza puso el grito en el cielo y juró en arameo y ahí empezaron mis desgracias en Intereconomía por «sugerencia» del Borbón. Pero no me arrepiento de haberlo publicado porque el rey va desnudo, es el mayor corrupto de España y ha destruido literalmente a la nación.
Después de Manuel Prado y Colón de Carvajal, le sustituyó como recaudadora Corinna, y de paso en la alcoba, y hasta el lamentable suceso de Botwana funciona la cosa, con Corinna viajando de Mata Hari en representación de Juan Carlos, siempre a Arabia Saudí, donde la monarquía es omnipresente y muy complaciente, como bien de Estado, en el avión del monarca como primera dama de hecho, pero desde Botwana es una amante despechada y eso es terrible, demoledor, pavoroso.