AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños


Godella: El perfil de la podemita y el silencio feminista

Redacción




Editorial.

Tres días después del espeluznante hallazgo de los cuerpos sin vida, con el cráneo machacado, de dos niños niños de cinco meses y tres años y medio, en Godella, se mantiene el silencio estruendoso de las feministas ante los indicios de que haya podido ser la madre la culpable, en medio de lo que los médicos forenses han diagnosticado como un brote psicótico dentro de una esquizofrenia hasta el momento no diagnosticada.

María Gombau y Gabriel Salvador Carvajal, con sus hijos.

El crimen se podía haber evitado y hay un fallo clamoroso del Ayuntamiento de Godella, tanto de los servicios sociales como de la Policía Local. En medio de esta tragedia, hay que destacar la responsabilidad y el desvelo de la abuela, Noemi, que denunció en varias ocasiones con toda premura, que se trasladó al Centro de Salud de Godella para conseguir ansiolíticos para su hija y que fue tratada de manera torpe, lenta y negligente.

Toda esta terrible historia entraña lecciones ideológicas de fondo, que se hurtan a una sociedad acostumbrada a que le presenten los sucesos de manera superficial y a que desaparezcan del panorama en cuanto a los medios del sistema no les interesa porque algo no entra dentro de la corrección política, y eso es lo que sucede habitualmente. Recordemos el caso de Ana Julia –negra, inmigrante y mujer, fuera, pues, de cualquier paradigma. He aquí algunas de las lecciones:

  • El matrimonio de María y Gabriel se movía dentro del orden moral podemita. María se destacó en el movimiento de los indignados del 15 M –generosamente financiado por George Soros– hasta el punto de que fue detenida en las puertas de las Cortes Valencianas. Al recuperar su libertad se manifestó como una perfecta portavoz del movimiento del 15 M, humus de Podemos.
  • La situación de penuria en la que se movían y obligaban a vivir a sus hijos no era la consecuencia de ninguna injusticia social, sino de una serie de decisiones personales erróneas en el orden o desorden moral de la ideología destructiva subyacente a Podemos. En el caso de María, su familia es más bien pudiente, como indican todas las fuentes, y lo único es que ella establecía un rechazo directo ideológico y mental a su familia extensa.
  • Podemos se dedica, en la línea de lo propuesto y promovido por el neoliberal George Soros, a banalizar las drogas y sus efectos perniciosos que son demoledores. Ha llegado incluso a plantear la legalización de la marihuana, como primer paso para la liberalización de todas las drogas, incluso planteando que sería la solución para la crisis económica. La disociación del pensamiento, la incoherencia al expresarse, el clima de alucinación que transmiten tanto María como Gabriel es propio de la drogadicción. La esquizofrenia se desarrolla, con frecuencia, como consecuencia del uso de drogas, que van destruyendo el cerebro e intensificando psicosis y paranoias y produciendo brotes psicóticos en los que la persona pierde por completo el sentido de la realidad y se manifiesta con conductas extremadamente violentas. Es precisa una campaña nacional clara contra el consumo de drogas y una información exhaustiva sobre sus efectos terribles.
  • Por supuesto, el horrendo crimen echa abajo por completo, y deja en ridículo, todas las falacias del feminismo, que sitúa la violencia como una emanación del heteropatriarcado. Es por esta cuestión que ha desaparecido con rapidez de los informativos y no se han realizado reportajes. PSOE y Podemos deberían abandonar las tesis del feminismo actual que no hacen más que daño a las personas reales, en aras de mantener un sucio negocio multimillonario.
  • Es difícil sustraerse a la sospecha de que la cadena de inmensas negligencias del Ayuntamiento de Godella, gobernado por Compromís, partido tan militante de la corrección política, se han debido, en alguna medida, a una protección absurda hacia una mujer próxima a sus tesis en muchos aspectos. Es llamativo e indignante que la Policía Local sólo viera en su rutinaria visita a la casa de los horrores un conflicto de María con la familia extensa, situando de esa manera a la digna abuela Noemí en la posición de culpable. Los servicios sociales que actúan frecuentemente como la Gestapo robando literalmente niños de familias que pueden sacar adelante a sus hijos, en este caso se han mostrado completamente ineficientes.
NO TE LO PIERDAS:   Puigdemont contesta con la amenaza de la DUI y el Gobierno activará el 155 el sábado, con el apoyo del PSOE

El crimen de Godella implica la lección de la necesidad de volver y primar en la sociedad los valores morales del orden natural, recuperar e incentivar la familia como ámbito de solidaridad natural y de colaboración, evitando denigrarla con esas groseras estupideces de considerarla terreno de dominación y, por supuesto, dejar de banalizar las drogas que producen efectos terribles e irreversibles sobre la mente.