Alice Giordano.
Organizaciones católicas de todo el mundo están reaccionando con indignación a las noticias de que el Papa Francisco ha despojado a un cardenal estadounidense de su vivienda y salario por cuestionar su apoyo a que los transexuales sirvan de padrinos y otras ideologías relacionadas.
El 27 de noviembre, el blog italiano de noticias católicas La Nuova Bussola Quotidiana informó que el Papa Francisco llamó al cardenal Raymond Burke, nativo de Wisconsin, una “fuente de desunión” en la Iglesia.
“El cardenal Burke es mi enemigo, así que le quitaré su apartamento y su salario”, informó La Nuova Bussola Quotidiana, citando a una fuente anónima en el Vaticano.
Otros importantes medios católicos, como la Agencia Católica de Noticias, EWTN y The Pilot, el periódico católico más antiguo de Estados Unidos, también informan o comentan la noticia.
Michael Hichborn, fundador de la organización católica conservadora Instituto LaPanto, declaró que las acciones del Papa no tienen precedentes y son censurables.
“Está destrozando la Iglesia”, dijo. “Lo que está haciendo es escandalizar a los fieles”.
C.J. Doyle, director ejecutivo de la Liga de Acción Católica de Massachusetts e historiador del catolicismo, dijo que cree que el Papa está promoviendo tales “doctrinas católicas irreformables” que es hora de que dimita.
“La hipocresía de este pontificado es asombrosa”, dijo. “El Papa habla de ‘misericordia’ y ‘acompañamiento’, pero elimina o castiga a cualquiera que no esté de acuerdo con sus novedosas y heterodoxas iniciativas”.
El cardenal Burke es el segundo funcionario católico en un mes que es disciplinado por el Papa por cuestionar puntos de vista promovidos que no se alinean con los principios tradicionales de la Iglesia católica.
A principios de este mes, la Santa Sede despidió al obispo Joseph Strickland, de Texas, después de que éste se negara a dimitir voluntariamente. El motivo del cese del obispo en su cargo pastoral fue revelado por el cardenal Daniel DiNardo.
Una transcripción de una reunión privada el 5 de agosto publicada en la revista jesuita y avalada por el Vaticano La Civilta Cattolica reveló que el Papa Francisco expresó su enojo y frustración por lo que llamó el pensamiento “retrógrado” de los conservadores en la Iglesia.
La noticia de la destitución del obispo Strickland salió a la luz cuando se mencionó brevemente en el “Resumen del Boletín” del 11 de noviembre emitido por la Oficina de Prensa de la Santa Sede, que no dio ninguna razón para ello.
Entre sus disensiones con la predicación del Papa, Mons. Strickland ha cuestionado la seguridad de las vacunas y el creciente apoyo del papado a las uniones civiles de homosexuales.
En septiembre, el obispo Strickland expresó su apoyo en X, antes conocido como Twitter, a un vídeo realizado por un sacerdote católico en el que declaraba que “no se puede ser católico y demócrata”. El vídeo se hizo viral.
El cardenal Burke, que, al igual que el obispo Strickland, ha sido un abierto crítico de la visión progresista del pontífice, fue uno de los cinco cardenales que enviaron una disensión, llamada dubia en la Iglesia católica, a Francisco pidiéndole que aclarara su llamamiento a bendecir las uniones entre personas del mismo sexo.
La dubia, según la Agencia Católica de Noticias, se hizo pública cuando se discutió en una conferencia de prensa el 2 de octubre en el Vaticano, durante la cual el cardenal Burke expresó su preocupación por el comportamiento de Bergoglio.
Se basaba en gran medida en la respuesta del Vaticano a las preguntas planteadas por José Negri, obispo de Santo Amaro, Brasil, sobre el reconocimiento de las personas transexuales y homosexuales en los sacramentos del bautismo y el matrimonio.
El obispo católico brasileño preguntó si una persona transgénero puede ser padrino de bautismo o testigo en un matrimonio católico. El Papa respondió afirmativamente a ambas preguntas.
“Bajo ciertas condiciones, un transexual puede ser admitido en el papel de padrino o madrina, incluso si se ha sometido a un tratamiento hormonal y a una intervención quirúrgica de reasignación de sexo”, respondió el Papa.
Hichborn cree que el Papa está librando deliberadamente a la Iglesia de funcionarios conservadores.
“Es una mentira absolutamente obvia decir que un hombre es una mujer. Así que si pueden utilizar una mentira para romper la voluntad de la gente dentro de la iglesia, pueden utilizarla para romper la voluntad de la sociedad”, dijo.
Hichborn dijo que le preocupa especialmente el mensaje que Bergoglio envía a los niños en un momento en que la ideología “woke” se utiliza para eliminar los roles tradicionales de los padres.
“El Papa está dando a los niños una base moral para decir que sus padres están equivocados”, dijo Hichborn. “Está creando una enorme división en la familia”.
Él y Doyle también hicieron hincapié en que el Papa está actuando en contra del derecho canónico al determinar la culpabilidad y el castigo de alguien sin seguir ningún proceso.
“Al final, dada la ilegalidad e ilegitimidad de sus acciones, todos los revolucionarios deben recurrir a la coerción”, dijo Doyle. “Ahora no hay duda de que Francisco busca imponer una revolución en la iglesia, particularmente en su intento de separar las enseñanzas morales de la iglesia de la Revelación Divina y la ley natural.”