Según publica La Voz de Galicia: El Centro Oncológico de Galicia y los muchos pacientes a los que asistió más allá de la asistencia médica están de luto. Este viernes por la mañana falleció en A Coruña el doctor Manuel Ramos Vázquez, director gerente del centro de referencia para la atención del cáncer en el área herculina, Ferrol e incluso parte de Lugo. Desde la Sociedad de Oncología de Galicia indican que su cuerpo se está velando en el tanatario Albia (rotonda de A Grela con la avenida de Arteixo). Este sábado se celebrará en el tanatorio una misa a las 15.30 horas.
Nacido en A Coruña en 1958, llegó a las instalaciones de esta fundación benéfico-privada en el año 1983 para cursar su especialidad y ya no se fue. Trabajó hasta hace unas pocas semanas, cuando la enfermedad a la que tanto esfuerzo dedicó le impidió seguir prestando un ejercicio profesional con el que se volcó en todos sus campos, de la asistencia a la administración sin dejar de lado la investigación, durante cuatro décadas.
Ocupó la jefatura del servicio de Oncología, fue también subdirector y en el 2009 accedió a la dirección médica, cargo que compatibilizó sin dejar de ver a sus pacientes. Desde el 2015 era el gerente de la institución que custodia los tres aceleradores lineales y las dos gammacámaras disponibles para los enfermos del área sanitaria de A Coruña, ya que en el Centro Oncológico de Galicia se realizan los tratamientos de radioterapia y medicina nuclear para la sanidad pública.
Ramos vivió en primera línea e impulsó algunos de los avances y desarrollos más destacados de la entidad fundacional de los últimos 40 años, ya que en este tiempo el Centro Oncológico, donde se instaló el primer acelerador de Galicia, ha ido incorporando nuevos equipamientos y prestaciones para los enfermos. En el 2008, cuando se creó el Consorcio Oncológico con el Sergas y el Ayuntamiento, subrayó la importancia de unir esfuerzos para coordinar estrategias frente al cáncer, y sintió especial satisfacción cuando, en el 2017, su hospital incorporó el primer PET-TAC de la sanidad pública en el área norte.« Es un salto cualitativo muy importante», dijo entonces Ramos, con constante inquietud por avanzar en medios para hacer frente a la patología oncológica sin perder de vista una de las señas de identidad del centro, la humanización en el trato.
Con proyectos como la renovación del área de hospitalización y pendiente de la integración de su centro en el futuro Novo Chuac, el apreciado oncólogo continuaba aplaudiendo todos los pasos que supusiesen una mejora en las condiciones para los 190 trabajadores del Oncológico y, sobre todo, para sus pacientes. «Nosotros estamos para acogernos a todo lo que quieran hacer para mejorar la asistencia», señalaba recientemente antes de reiterar que, entre tanto, su papel y el de toda la plantilla continuaría con idénticos objetivos: «Seguiremos trabajando, como siempre, para nuestros pacientes».