AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños


El Español no tiene ningún futuro, lo mejor es que cierre ya

Redacción




Luis Bru.

Del libro «Agatha Ruiz de la Prada, mi historia» se extraen, por la enjundia de los temas que trata, importantes lecciones como la muerte del periodismo. También que El Español no tiene ningún futuro, lo mejor y más conveniente es que cierre ya, pues está muerto.

Veamos, El Español es un error de partida, nació muerto: «Cuando se presentó El Español, en 2015, en el Palacio de Congresos de Ifema, asistieron unas tres mil personas. Al año siguiente, en una convocatoria suya no pasaban de cincuenta. Fue impresionante la expectativa que generó el periódico y también cómo se desinfló. ¿Quién iba a confiar en él? Ya no da exclusivas como antes, no quiere darlas porque no le conviene».

A los que pusieron pequeñas cantidades de dinero les estafó moralmente pues no adquirían acciones. Los más de 5.600 españoles que respondieron al “crowdfunding” lanzado por Pedro J Ramírez para poner en marcha su digital han sufrido una presunta estafa, que podría tener consecuencias penales, según valoran fuentes jurídicas consultadas por Rambla Libre. Esos 5.000 aportaron 3,5 millones de euros, el 20% del capital total, de 17,1 millones. Pedro J Ramírez tiene el 40% del capital, y se puso un sueldo con el que recuperaba la inversión en 6 años, por lo que se está financiando personalmente de los ‘inversores‘ estafados. Otro 40% está en manos de accionistas con representación en el Consejo de Administración.

Los que aportaron dinero en el “crowdfunding” no han recibido sus títulos de acciones, tal y como se comprometió la empresa El León del Español Publicaciones SA. Las acciones implican derechos como la asistencia a la Junta General de Accionistas y el especialmente importante de poder venderlas en el Mercado de Valores. En una presunta estafa monumental, Pedro J Ramírez lo que vendió fueron “participaciones“, una forma moderna del timo de la estampita. Como indica uno de los estafados, “las acciones (por llamarlas de algún modo) de El Español siguen sin poder venderse en el mercado de valores. Por lo que sigues sin recuperar la inversión. Vergonzoso“.

NO TE LO PIERDAS:   Descubre algunos de los planes de ocio más interesantes para este verano

La diseñadora traza un paralelismo entre Eduardo Inda y el innombrable. «Inda quería comerse el mundo y el otro, que ya lo ha digerido, ve cómo lo que se van comiendo es su patrimonio. Le encantaría pegar un pelotazo y vender el periódico, y quedarse como reina madre, saludando con la mano derecha hacia un lado y hacia el otro con la mano perdida. El innombrable tiene setenta años muy mal llevados y nunca ha estado bien».

Fracasado desde el inició, sin nada que decir distinto, algo fundamental en un medio de comunicación, el innombrable abandona pronto el campo del periodismo independiente para entregarse con armas y bagajes al servilismo más lacayo. Se hace trampas al solitario y compra audiencias: algo «que han hecho otras empresas, pero que él lo implementó a lo bestia: comprar webs. Páginas para generar tráfico. Así se consiguen unas cifras hinchadas».

Todo más falso que un Judas de plástico. Además, caído Ciudadanos, el partido de Albert Rivera, que lo único que hizo fue salir en una foto en pelotas, gloriosa descripción de Agatha, y de Ignacio PaniAguado, con la sensación de que el innombrable es realmente gafe y carece en absoluto de olfato, El Español carece en absoluto de futuro. Es un medio muy personalizado en un hombre con un pie en el estribo. En el mejor de los casos, o en el peor, no tiene continuidad posible. Es, metafísicamente, una ruina, un completo fracaso.

La continuidad del proyecto parece ser Cruz Sánchez de Lara que ha abandonado la abogacía, o ha sido al revés, y ha sido nombrada vicepresidenta del Consejo de Administración y es además, por decir algo, editora de enclave ODS, la sección, financiada por la Fundación La Caixa, que preside el miembro supernumerario del Opus Dei, Isidro Fainé, que es más bien una colección de publirreportajes en favor de la satánica agenda 2030 y el del desorden mundial.

NO TE LO PIERDAS:   El misterio de El Español: sin exclusivas, sin pulso, entregado a Ciudadanos y...

Resulta hilarante que el día que falte el innombrable, no muy lejano, vaya a ser sustituido por Cruz, que no es nadie en el mundo del periodismo.