Según publica La Voz de Asturias, Amieva está de luto. La muerte de Juan Manuel García Traviesa, de 23 años y «muy querido» en la zona, ha consternado a todos los vecinos de este pueblo del oriente asturiano. Una tragedia que de nuevo ha vuelto a golpear a esta familia amievense. Su padre, Aníbal Sánchez, falleció «repentinamente» el pasado junio cuando trabajaba en una obra en Bilbao.
«La dinastía de hombres buenos mengua injustamente y abre sus eternos brazos para arropar a todos que quedan», asegura Miguel Ángel Fernández, quien en sus redes sociales lamenta la pérdida del joven ganadero. «Hoy todos somos un poco huérfanos y los que contábamos con su saludo casi diario, su sonrisa tímida y su sincera amistad somos un poco más pobres», asegura.
El joven había salido de casa a ver a su ganado, pero tras horas sin saber de él, sus familiares alertaron al Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA). Tras una intensa búsqueda, un equipo cinológico de la Unidad Canina de Rescate del SEPA, formado por dos guías y un perro, encontró la pasada noche su cuerpo sin vida en un matorral a unos 200 metros del lugar donde tenía su vehículo, un quad, en una zona conocida como La Visitancia. Por el momento, se desconocen las causas de su fallecimiento. La Guardia Civil, que descarta una muerte violenta, investiga si el joven pudo sufrir un accidente con el vehículo o algún otro percance.
Juan Manuel tuvo que aprender a sacarse las castañas del fuego desde bien pequeño. Hace diez años su familia se tuvo que deshacer de todas sus vacas a causa de un brote de tuberculosis. Por aquel entonces, sus vecinos organizaron una colecta para que pudiese empezar de cero.
Hoy todos aquellos que en dicho momento le ayudaron lloran su pérdida. Su cadáver será recibido mañana jueves, día 27 de octubre, a las cinco de la tarde, en la Iglesia de Amieva, donde se celebrará el funeral de cuerpo presente y a continuación se procederá a su entierro en el cementerio parroquial.