Fernando Alonso Barahona. Crítico de cine.
Uno cero uno de Elena Hazanov, el límite de lo imposible, está basada en la biografía de Natalia Molchanova, campeona mundial de Buceo Libre y Apnea y la única mujer que, contra todo pronóstico, trató de superar los límites de lo imposible: alcanzar por primera vez los 101 metros de profundidad en descenso libre.
Cine y deporte realizado en Rusia pero con la inspiración de clásicos como la serie Rocky de Stallone o Juntos para vencer, con Chuck Norris.
Tras un traumático divorcio, Natalia Molchanova, futura campeona mundial de Buceo Libre y Apnea, intenta sacar adelante a sus hijos adolescentes. Un hecho fortuito la lleva a entablar amistad con Ignat, un hombre diez años más joven que ella que la introduce en la práctica del buceo libre. De manera inesperada, Marina encuentra en esa práctica deportiva de alto riesgo una nueva razón por la que vivir y lo que es más importante: un entorno en el que enfrentarse a sus propios miedos.
La sinopsis oficial de la película resume a la perfección su contenido. Una historia de desafíos y superación personal cargada de emoción y adrenalina que narra la extraordinaria historia de esta deportista de élite, fundadora de THE FREE DIVING FEDERATION, la primera federación de Buceo Libre Internacional.
El reparto lo componen: Viktoriya Isakova, Christopher Dingli, Filipp Ershov, Artyom Tkachenko, Kirsty Bartolo, Vladimir Yaglych, William Erazo Fernández, actores y actrices desde luego desconocidos en España pero que componen de forma exacta sus personajes, sobre todo la Isakova en el papel de la protagonista.
https://www.youtube.com/watch?v=CveJagf5wHQ&t=4s
Helena Hazanov nació en junio de 1977, firmó en 2014 una curiosa película: Love Express ( con Mathilda May ) que fue su carta de presentación en el mundo del cine ( antes solo había rodado cortometrajes ).
En 2019 estrenó Lyubovnitsy, una historia de tres mujeres divorciadas que crean – en la Rusia actual – una especie de club femenino o círculo de mujeres para ayudarse mutuamente y además prestar auxilio y apoyo a otras mujeres de su entorno.
No hay sorpresas en este límite de lo imposible más allá de descubrir una película rusa, cinematografía poco conocida en España. Y, sin embargo, la historia engancha y el perfil de esa mujer batalladora interesa por mucho que el deporte pueda parecer lejano a muchos espectadores. El elemento dramático más importante es el control mental, un mal pensamiento o una falta de concentración a cien metros debajo del agua puede resultar mortal. Y será en este esfuerzo casi sobrehumano el escenario en el que ella tratará de lograr no solo el triunfo deportivo sino el equilibrio personal.
Explorar los límites físicos del ser humano para mejorar, sin todo un reto que la actriz Viktoriya Isakova logra transmitir en la pantalla gracias a su talento y con la ayuda desde luego de una extraordinaria fotografía.
El personaje biografiado posee un palmarés impresionante: 22 campeonatos del mundo y 40 récords mundiales, además de 12 medallas de oro individuales y 2 medallas de oro por equipos de los Campeonatos Mundiales.
La película sin otras pretensiones excesivas entretiene y emociona, puro cine deportivo sobre los valores positivos del esfuerzo el afán de superación y el sacrificio.
Merece la pena.