Virginia Montes.
Desde el comienzo de la crisis de Covid-19, muchos países, incluidos Estados Unidos y Francia, han acusado a Beijing de haber ocultado información y haber tergiversado la verdad sobre la epidemia.
Los cargos continúan. Varios meses después del comienzo de la epidemia de coronavirus, China continúa siendo atacada por varios países. Si Estados Unidos ha criticado repetidamente a Beijing por haber ocultado información sobre la pandemia, Europa tardó un poco más en reaccionar, antes de acusar oficialmente, a mediados de junio, el China de «desinformación» . Este martes 14 de julio, le toca a Japón señalar la responsabilidad de su vecino, en su libro blanco anual sobre su política de defensa, informa en particular Le Figaro .
Si bien se habían calentado desde finales de 2018, las relaciones diplomáticas entre los dos países se han renovado una vez más en los últimos meses, en un contexto de insatisfacción con la gestión china de la crisis del coronavirus. Japón acusó a China de haber llevado a cabo campañas de «propaganda» y «desinformación» . Como ejemplo, Tokio citó comentarios en Twitter de un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China que sugirió en marzo que el Covid-19 fue presentado a Wuhan por el ejército de los Estados Unidos, o el promoción de hierbas medicinales chinas para tratar la enfermedad.
Al mismo tiempo, Japón también expresó «profunda preocupación» por los reclamos de su vecino en el Mar del Sur de China, así como por los islotes Senkaku / Diaoyu. En su libro blanco, Tokio criticó a Beijing por «continuar implacablemente sus acciones unilaterales para imponer un cambio en el status quo en [estas] islas» , administrado por Japón. Los dos países han estado reclamando su respectiva soberanía durante siglos sobre este micro-archipiélago deshabitado, cuyo fondo marino es potencialmente rico en hidrocarburos.