Editorial.
Ciudadanos es una mierda pinchada en un palo y se ha convertido en una especie de satélite del PSOE que pacta lo que le echen, en momentos críticos donde ha desarrollado una gestión negligente y llena de groseros fallos en su política sobre la pandemia del coronavirus. Inés Arrimadas es un pozo de mierda que le da lo mismo que el PSOE pacte con Bildu. No se sabe para qué sirve Ciudadanos, un partido inmundo y delirante, que ha perdido sus coordenadas fundacionales.
El PP firmó un acuerdo con Ciudadanos en circunstancias bien distintas, claramente lesivo para los intereses del PP, entregándole, a cambio de unas siglas gastadas que restan más que sumar, dos diputados de los escasos nueve que piensa sacar el partido de Pablo Casado. Ese acuerdo no debe ser mantenido bajo ningún concepto, si se quiere evitar una situación ridícula, que llevaría a un gran número de votantes a la abstención.