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Carta abierta a Susanna Griso, inventora del nuevo periodismo que se inventa las noticias

Redacción




Luis Bru.

¡Vaya ridículo, Susanna! Dice Antena3 que va a tomar medidas, la que tú deberías tomar, Susanna, es meterte bajo tierra después de que se te caiga la cara de vergüenza, si es que la tienes. En este te han pillado, pero ¿cuántos reportajes has emitido trucados, manipuladora de cuarta? ¿Has emitido alguno que tenga una pizca de verdad?

La situación es tan ridícula que produce hilaridad, pero no tiene gracia. El sistema tiene dos caras amables para imponer sus estúpidas doctrinas, una es la de Ana Rosa Quintana, las de las Sicav, que no contribuye nada pero siempre predica a favor de la opresión fiscal de los demás, y le pone que los machotes antifas le peguen palizas brutales a las chicas fachas, y Susanna Griso, más modosita, más melosa, pero una manipuladora compulsiva.

Claudia, mentirosa compulsiva: el nuevo periodismo.

Porque, Susanna, el reportaje contra los piropos de la tal Claudia García -¿se llama así, o es mentira o todo es mentira en su deleznable programa?- lo has visionado tú, lo has autorizado tú y tú eres la responsable de la tomadura de pelo. Sale a la calle una redactora de Espejo Público a los alrededores de Plaza Castilla, a provocar. El viejo periodismo gastaba la broma de que no dejes que la realidad te estropee un buen reportaje, el nuevo periodismo de Susanna Griso se inventa directamente la realidad, y santas pascuas.

¡Y encima es gay!

En Plaza Castilla va todo el mundo petado a coger el Metro o el autobús, y no está para echar piropos, que además se ha convertido en cuestión de alto riesgo. La trapacera Claudia podía haberse buscado una obra a la hora del bocadillo, pero esto ya no es la burbuja inmobiliaria y, además, los de las cuatro obras son titulados universitarios con contratos basura temporales, así que las redactoras de Espejo Público son muy creativas. Debemos a Rolograma el descubrimiento del asqueroso pastel. “Todo es pactado. La chica nos paró y dijo que la dijéramos piropos. No sabíamos ni siquiera que iba a salir en Espejo público”. Es decir, se les propone que hagan de machistas para justificar que Unidos Podemos proponga sancionar con multas los piropos, lo que permitirá salir tranquila a la calle a Cristina Almeida.

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Y sigue el espectáculo en plató, con la tal Claudia García -¿se llamará así o es todo mentira?- diciendo que se sintió intimidada por los piropos y por las miradas. Una de las frases que sugiere la colaboradora de Susanna Griso sugiere al que pasaba por allí es: “¡Qué polvo tienes, guapa!”. Que no es un piropo, es una estricta marranada, pero es lo que se le ha ocurrido a Claudia que piensen y digan cuando la vean pasar. Una mente muy perturbada. ¡Qué detritus de periodismo! ¡Qué cloaca mediática! ¡Qué espejo más sucio! Y para que no falte de nada en el esperpento de la nueva picaresca periodística, resulta que el piropeador obsceno es gay y se excusa diciendo que, por supuesto, no es nada machista.

Susanna Griso, posando para Intervíu.

Así se adoctrina a los españoles con esta manipulación irrestricta de gente muy degenerada, muy lacaya, sin escrúpulos morales. El periodismo ha muerto y sólo quedan trepas inventoras como Claudia García -¿se llamará así o es todo mentira?- y manipuladoras de hablar modosito y alma podrida como Susanna Griso. Porque la responsable, Susanna, eres tú.

La próxima vez te inventas un crimen de violencia de género con la Claudia García o como se llame.