Josep Sansano.
Nuevas Generaciones de Alicante lleva cinco años sin celebrar elecciones y tres con una Gestora. Eso en un partido que dice que se está renovando y que se regenera, y en el que buena parte de los burócratas del PP alicantino han votado a Pablo Casado precisamente por ese discurso, que, por supuesto, ellos no cumplen.
Esta situación gravemente anómala y contraria directamente a los Estatutos ha sido llevada a los Juzgados por dos militantes de Nuevas Generaciones hartos de esta tomadura de pelo, tal y como ha publicado en exclusiva Rambla Libre, porque nosotros no tenemos que llamar a los prebostes del PP ni al alcalde de Alicante para ver si publicamos o no la información, como hacen los medios lacayos alicantinos, que no se dedican a dar información sino a lamer el culo a los políticos, cosa que hacen con gran maestría y experiencia.
La tormenta desatada por la exclusiva de Rambla Libre hace que se estén sucediendo las reuniones en la cumbre para analizar como afrontan la denuncia judicial presentada, todo menos lo que tienen que hacer que es convocar elecciones en Nuevas Generaciones. Esta tarde, según fuentes solventes de la propia sede provincial, está prevista una reunión a la que asistirían Toño Peral, presidente del PP de Alicante, y principal responsable de este desastre y de la falta de actividad de ese partido, José Císcar, presidente provincial y el alcalde, Luis Barcala.
Éste, al parecer, pretende colocar al frente de Nuevas Generaciones a Carolina Cutanda, hermana de una de sus asesoras e hija de Vicente Cutanda, quien ha sido nombrado para el Consejo de Administración de A Punt, el nuevo Canal 9. Vicente Cutanda era un fervoroso zaplanista y un personaje de tercera fila en el mundo de los medios de comunicación. La posible candidatura de Carolina Cutanda haría oscilar hacia la izquierda a Nuevas Generaciones en posiciones próximas a Podemos.
Otro de los clanes familiares del PP alicantino, el ahora encabezado por la teniente alcalde Mari Carmen de España, hija de Julio de España, que fuera presidente de las Cortes Valencianas con Zaplana y uno de sus mayores pelotas, aunque ahora no se acuerde, quiere, a su vez, colocar a Pablo Sanz.