AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños


Carta del Padre Jesusmary Missigbètò al Prefecto del Dicasterio para el Clero y al Prelado del Opus Dei

Redacción




Su Eminencia Lazarus You Heung-Sik                                                          Su Excelencia Fernando Ocáriz
Prefecto del Dicasterio para el Clero                                                              Prelado del Opus Dei
VATICANO                                                                                                          ROMA
Eminencia y Excelencia,

¡Que Jesús y María os bendigan siempre! Con humildad y respeto, quisiera solicitar de
vuestra alta benevolencia, por falsas acusaciones y falta de pruebas, la anulación del proceso
abierto en mi contra el 19 de febrero de 2024.
1. Según la carta del 8 de abril de 2024 del Vicario del Opus Dei, basándose en el canon
1371§1, se me acusa de “desobediencia a lo que la Santa Sede te había impuesto en el
decreto del 30 de mayo de 2022”, es decir, que yo debía guardar silencio total sobre los
errores morales y doctrinales del Papa Francisco. Pero he aquí el contenido del canon:
“Quien desobedece a la Sede Apostólica, al Ordinario o al Superior cuando mandan o
prohíben algo legítimamente, y persiste en su desobediencia después de haber sido
amonestado, debe ser castigado según la gravedad del caso con una censura, con la
privación del oficio o con otras penas de las enumeradas en el c. 1336, §§ 2-4”. Por tanto,
la acusación es falsa porque no tiene en cuenta un aspecto importante de la virtud de la
obediencia: la legitimidad de la orden dada. En efecto, hay que plantearse necesariamente
una pregunta: ¿El magisterio de Francisco contiene errores, SÍ o NO? Si es NO,
efectivamente estoy en falta y debería haber guardado silencio. Si es SÍ, no sólo no estoy en
falta, sino que para no cometer el pecado de complicidad y adulación [1], tengo, como
sacerdote, la grave obligación moral de informar a los cristianos sobre los errores que
Francisco se ha negado a corregir desde 2016 y que dañan su conciencia moral. Cualquier
persona intelectual y moralmente honesta sabe que la respuesta es SÍ, ya que Francisco ha
recibido numerosas correcciones filiales de sus hijas e hijos de todo el mundo (profesores
universitarios y expertos en Teología, Moral y Derecho Canónico) que le han invitado a
corregir sus errores [2]. En consecuencia, mi desobediencia es legítima ya que la orden dada
en el decreto del 30 de mayo de 2022 es ilegítima.
2. Según la carta del 8 de abril de 2024 del Vicario del Opus Dei, mis “publicaciones
pueden ser objeto del tipo penal establecido en el canon 1373 del Código de Derecho
Canónico”. He aquí el contenido del canon: “Quien suscita públicamente la aversión o el
odio contra la Sede Apostólica o el Ordinario, a causa de algún acto del oficio o del cargo
eclesiástico, o induce a desobedecerlos, debe ser castigado con entredicho o con otras
penas justas”. ¿Cuáles son las pruebas de esta acusación (fechas y lugares, palabras y
acciones que constituyan aversión u odio contra la Sede Apostólica o que inducen a la
desobediencia de una orden legítima del Papa Francisco)? En mi carta del 9 de abril de
2024, pedí al Vicario del Opus Dei que me las enviara por escrito para poder preparar mi
defensa, pero hasta ahora no he recibido nada. Esto era previsible, ya que las pruebas no
existen: mi conciencia y Dios son testigos de que nunca he pedido a los cristianos que
tengan aversión u odio contra la Sede Apostólica ni que desobedezcan las órdenes legítimas
del Papa Francisco. Según el Derecho Canónico y el Derecho Civil, esta segunda acusación
es inaceptable porque el acusador no puede presentar pruebas de su acusación.

NO TE LO PIERDAS:   Un coche autónomo de Uber mata a una mujer en Arizona

3. Por favor, permítanme ahora señalarles la reciente condena del Cardenal Marc Ouellet (3
de abril de 2024) por un tribunal civil francés, por haber expulsado a una mujer de una
orden religiosa, sin pruebas fundadas de acusación. Fue este mismo cardenal quien validó
mi injusta expulsión del Opus Dei, sin pruebas de acusación, como señalé al Vicario del
Opus Dei en mi carta del 26 de marzo de 2024. ¿Debería yo en el futuro acudir a un tribunal
civil para reclamar daños y perjuicios por mi injusta expulsión del Opus Dei y,
eventualmente, por mi injusta expulsión del estado clerical? En efecto, el 22 de enero de
2021, en Yamoussoukro (Costa de Marfil), fui echado (la palabra no es desacertada, ya
que es exactamente lo que ocurrió en presencia de testigos) de mi lugar de residencia
habitual por un sacerdote, con prohibición de regresar, prohibición dada a este sacerdote por
el Vicario del Opus Dei. Después de vivir 23 años (1998-2021) en centros de numerarios del
Opus Dei, de repente me apartaron de mi entorno habitual y de mis amigos, y me obligaron
a vivir solo en un convento de carmelitas durante 5 meses. Sufrí daños psicológicos,
afectivos y morales e incluso fui calumniado, ya que varios amigos me contaron que
directores del Opus Dei en Roma, Francia y Costa de Marfil, sin ninguna base lógica ni
médica, dijeron a muchas personas que yo tenía problemas psiquiátricos que me llevaron a
contradecir públicamente al Papa Francisco.
4. Sin embargo, no soy el único sacerdote que ha sufrido tales abusos de poder y
humillaciones; hay muchos otros en el Opus Dei, incluso laicos. Por ejemplo, José Luis
Aberasturi, sacerdote y periodista español. Estos abusos existen también en varias diócesis
del mundo e implican a sacerdotes, religiosos y religiosas, laicos y laicas. La Coalition for
Canceled Priests les puede confirmar esto. He aquí algunos ejemplos: Monseñor Juan de
Dios Olvera Delgadillo de México, Padre Tullio Rotondo de Italia, tres ermitaños de
Escocia (Stephen de Kerdrel, Colette Roberts y Damon Kelly), John Rist, Josef Seifert, etc.
5. ¿Es posible que el Prefecto del Dicasterio para el Clero sea silencioso e indiferente ante
los sufrimientos de tantos sacerdotes en todo el mundo que son maltratados porque predican
la verdad sobre el relativismo y la ética de situación que Francisco ha introducido en la
enseñanza tradicional de la Iglesia? ¿Es posible que Su Eminencia Lazarus You no vea que
es injusto y cruel expulsarme del estado clerical porque informo al Pueblo de Dios sobre los
errores de Francisco? ¿Acaso usted expulsó del estado clerical al Padre Marko Rupnik, que
abusó sexualmente de varias monjas desde 1985? No. ¿Acaso usted expulsó del estado
clerical al Padre Krzysztof Charamsa que, después de trabajar varios años en el Vaticano,
apareció en los medios de comunicación el 3 de octubre de 2015 con su compañero,
afirmando ser “un sacerdote homosexual, feliz y orgulloso de su identidad”? No. ¿Acaso
usted expulsó del estado clerical al Padre Luigi Capozzi que, en junio de 2017, organizó una
fiesta homosexual (con consumo de drogas) en un piso del Vaticano? No. ¿Acaso no ha
llegado por fin el momento de que todos los cristianos exijan que cesen las injusticias y que
se invite al Papa Francisco a corregir los errores de su magisterio?

NO TE LO PIERDAS:   Blanquerna: El Tribunal Constitucional admite el recurso de amparo y frena el ingreso en prisión

Atentamente,
Firmado (firma electrónica)
Padre Janvier Gbénou