Enrique de Diego
Víctor Barrio, torero, natural de Segovia, de 29 años, ha muerto en la plaza de Teruel, cuando lidiaba el tercer toro de la tarde. El asta del toro le entró por la axila y le llegó al corazón.
Desde RL, quiero mostrar mi respeto por Víctor Barrio y transmitir mi pésame a su familia y elevar mis oraciones por su alma.
Ni todos los toros del mundo son equiparables al valor de una vida humana. Sostenemos en RL ese principio civilizado y humanitario.
Una cosa es ser un animalista y otra cosa es ser un animal degradado. Algunos comentarios en las redes no son más que exhibición de degradación moral y falta de humanidad.
Dejo al margen la evidencia de que sin la fiesta de los toros, el toro de lidia no existiría, se extinguiría.
Víctor Barrio no era, en ninguno de los sentidos, un torturador, sino un torero, un hombre valiente que se jugaba la vida y de hecho, la perdió.
Entre el toro y el hombre, nosotros siempre estaremos por el hombre.
Descanse en Paz, Víctor Barrio.