Enrique de Diego.
La Guardia Civil de la Primera Compañía de San Lorenzo de El Escorial sigue denunciando y atosigando con identificaciones y denuncias a los vecinos que acuden a merendar, pacíficamente y manteniendo las medidas de seguridad, al descampado que hay junto a la mansión de Pablo Iglesias.
Parece que, aunque los juzgados de Collado Villalba ya se hayan pronunciado y la Fiscalía de igual modo en que no ven delito en las protestas, estos guardias civiles siguen complicando la vida a estos vecinos día tras día de forma impune, lo que ya es desagradable.
Estos agentes tienen un capitán que es quien dirige la Compañía y a los tenientes que hemos visto actuar, alguno de forma que provoca vergüenza ajena y que ha sido denunciado ante el Ministerio del Interior para que se abra una investigación por sus actitudes con los ciudadanos, el cual sería el responsable directo de las actuaciones de estos agentes a sus órdenes, incluido el dificultar el derecho de petición a uno de estos vecinos por parte del Puesto de Galapagar, de lo que informábamos la pasada semana.
Si a estos agentes no les sirve lo que la juez titular del Juzgado número 4 de Collado Villalba dijo en su auto o que la Fiscalía sigue sin ver delito en las protestas, les recomendamos ver el vídeo del propio vicepresidente donde dijo que los escraches son jarabe democrático y expresión de la democracia.
Recordamos dos cuestiones a estos agentes; no existe la obediencia debida y la línea tan fina que les separa de la prevaricación sabiendo que no es delito lo que hacen estos vecinos, según jueces y fiscalía.