Luis Bru.
A sueldo de las farmacéuticas -un millón de euros ingresado en su chiringuito en el 2020, luego hablar de chiringuitos- Juan Luis Stteegamn, apellido de rancio abolengo patrio, está dispuesto a perdonarnos la vida para que los gobernantes «persuadan a los que dudan». Habrase visto tamaño cabestro, que no dudamos, que estamos convencidos de que la «terapia génica», que no vacuna, como ha confesado un directivo de Bayer, es un veneno de muerte. Se lo puede poner él en los testículos y en el pito, dos de Pfizer y una de refuerzo.
Pero este demente piden que se mira hacia Austria, que ha decretado el pinchazo obligatorio para el 1 de febrero de 2022, al que se opone el FPÖ, con aquí también la postura oficial de Vox está a favor de la timo vacunación obligatoria. ¿En qué quedamos, Santi? ¿Os es un doble juego que os traéis? ¿O tu mansión es verdad que huele a farmacia? Porque, ya sabes, el que nace lechón muere cochino. Este tuit debería significar, en buena lógica, la expulsión de tu partido. Pero tu lógica, Santi, no es de este mundo, sino del inframundo, en el que te reúnes con Ana Patricia Botín, Dices que estás contra la agenda 2030; mentira, siendo la timo vacuna el elemento clave de esa agenda y su propuesta de muerte o esclavitud y fuera patrias.
Volviendo a Olmedillas. Lo que quiere provocar es un Rotterdam español. Mira lo que dice Gerrit van de Kamp, presidente del sindicato policial más grande, ACP: «Sí, interminables charlas sobre derechos fundamentales, interminables charlas sobre hospitales, y el resto que lo resuelva la policía. Llevamos años y años advirtiendo contra la radicalización de la protesta, personas que se sienten amenazadas en su libertad y están a punto de estallar. Y van, los gobernantes y introducen algunas medidas más que no se pueden hacer cumplir en absoluto. Y la policía a hacerse cargo de la miseria ‘.
Aún más, «Imagínate un joven que no le dejan hacer nada, no puede encontrar un hogar en ningún lado. Y sobre todo, no debes perder la confianza en el gobierno». La Policía no está en condiciones de imponer la vacunación obligatoria, no está en condiciones de vigilar el pase covid. Esos son sueños húmedos totalitarios imposibles de un imbécil como Steegmann. Tan tonto no es, que sus buenos dineros cobra por ello. ¿Cuántos te reparte, Santiago?
