Enrique de Diego
Al mentiroso que se inventó el falso caso del lino, al que ha robado documentos del Ministerio de Defensa, al socialista José Bono hay una palabra que le define: multimillonario. No millonario, sino multimillonario de la lista Forbes, si tuviera a la vista todo su dinero y no oculto en Las Bahamas.
Bono llegó a la política, después de ejercer como abogado laboralista, con una mano delante y otra detrás. No puede aducir lo tan manido de la herencia, pues su padre, alcalde franquista de Salobre, Albacete, le dejó una casa en el pueblo y dos tierras. En el año 2001, ayer como aquel que dice, los ingresos familiares eran de 96.000 euros anuales y las deudas eran de 417.371,01. Una economía modesta, por decirlo suavemente. Nada hacía presagiar que Bono se convirtiera en uno de los hombres más ricos de España, aunque él lo tenía previsto pues ese año pone en marcha la sociedad de Hípica Almenara, un emporio que se valora por encima de los 5 millones de euros, y que ninguna persona con una economía tan endeble podía afrontar.
Bono es un multimillonario, con patrimonio de multimillonario y con tren de vida de multimillonario, tanto él como sus hijos. José Bono Jr, el jinete administrador de Hípica Almenara, se codea en el circuito internacional con Athina Onassis, Carlota Casiraghi y Marta Ortega, la heredera de Inditex. “Me quedo con Marta, es un encanto y muy profesional”.
Sofía, la hija menor, cursa estudios en Brillantmont School, en Lausanne (Suiza), con un coste por curso de 70.000 euros, que sólo pueden permitirse 150 familias, pues ese es el número de alumnas. Claro, que desde los nueve años, Sofía es propietaria del local en el centro de Albacete donde está instalada la franquicia de la joyería Tous y del ático de la Calle Velázquez, a cien metros del Retiro, que costó 1,6 millones de euros, que ella no ha ganado. Esta adquisición y la del piso del Madrid de los Austrias, Calle San Justo, 1, 1 millón de euros, sugieren afloración de dinero y liquidez superlativa; nada que ver con el Bono endeudado de 2001. Poniendo propiedades a nombre de sus hijos y sociedades, Bono trata de difuminar su patrimonio inmobiliario. Ana Bono, tras fracasar con su despacho de abogados, fue contratada de inmediato por Iberdrola con un sustancioso sueldo, la empresa eléctrica que fue primada por José Bono en la concesión de parques eólicos en Castilla-La Mancha.
El multimillonario Bono dice que la Editorial Planeta le pagó como adelanto de sus memorias 860.000 euros, una cifra desorbitada para un libre de interés descriptible y ventas escasas, muy alejadas del best-seller. Sin embargo, si sería de seguro un best-seller un libro de autoayuda sobre Cómo hacerse rico desde la política al tiempo que quiebras Caja Castilla La Mancha, despilfarras el dinero en el aeropuerto de Ciudad Real y conviertes Seseña en el emblema del quebrado pelotazo urbanístico.
No, José Bono no ha conseguido, en muy poco años, su ingente patrimonio inmobiliario y su abultada cuenta corriente en el paraíso fiscal de Las Bahamas ahorrando de su sueldo, ni con ganancias en Tous, ni con la gestión en Hípica Almenara, que se la han ido regalando entre todos los empresarios castellano-manchegos, con la contribución de Onde 2000, de Francisco Hernando, el pocero. Lo ha conseguido a base de mordidas y comisiones. Y lo llamativo del intocable Bono es que su enriquecimiento ilícito es manifiesto, evidente y clamoroso. Bono, con unos cuantos amigos empresarios, ha depredado y esquilmado la tierra de Don Quijote. Por ejemplo, un despilfarro como el del aeropuerto de Ciudad Real puede ser un gran negocio. Lo veremos.
Hubo un momento –y esto serviría para el libro de autoayuda- en que José Bono percibió que el poder político es efímero, mientras el económico permanece en la cuenta corriente. Y desde ese momento sólo cultivó las relaciones con los adinerados, a los que ahora pertenece.
Su ingente patrimonio exige una explicación y una investigación a fondo.
http://ramblalibre.com/2017/01/23/caso-bono-1-la-auditoria-del-santander-bahamas-international-limited/
http://ramblalibre.com/2017/01/24/caso-bono-2-la-abultada-cuenta-de-el-paellas-y-el-bombillas/