Enrique de Diego
He aportado suficientes datos, en los dos artículos anteriores, para una investigación judicial rápida y eficaz del patrimonio oculto de José Bono en el paraíso fiscal de Las Bahamas: dentro de filial del Santander, conocido por el departamento de auditoría, los empleados de la filial. El periodista no tiene los instrumentos de los que goza el Estado de Derecho, no puede enviar una comisión rogatoria o pedir al Banco de Santander toda la información de José Bono o llamar a declarar al departamento de Auditoría. Lo digo porque siempre algunos piden pruebas que sólo pueden conseguirse desde fiscalía o desde el ámbito policial.
Algunos bromistas supongo que bienintencionados siempre animan a acudir a los juzgados. Debe ser un ámbito que no conocen. De repente a algunos se les provoca una inmensa amnesia respecto al hecho de que la Justicia en España es cualquier cosa menos independiente, que la Fiscalía depende del Gobierno y los jueces de un Consejo General del Poder Judicial parlamentarizado. Como dice Yrene Calais, el juez ante la denuncia a un político tiende a no complicarse la vida y a cobrar a fin de mes, que hay muchas crisis. No tiene ningún beneficio y sí puede tener muchos perjuicios. La jueza Mercedes Alaya acaba de declarar que hay una Justicia para los poderosos y otra para el resto. Por supuesto, que he denunciado los hechos ante el Juzgado de Guardia, y en varias ocasiones los he puesto en conocimiento de jueces y fiscales que no me han hecho ni caso. Va de suyo que los jueces de Castilla-La Mancha han sido ascendidos con el visto bueno de Bono, más intocable que Al Capone.
Hace tres años, denuncié con un cúmulo de pruebas que la presidenta del PP de Elche Mercedes Alonso había montado una asociación tapadera, la Asociación Popular de Elche, a través de la que funciona financieramente el PP, con lo que toda su financiación es ilegal. Todo han sido trabas y lentitud. Hace unos días, la jueza Gemma Somevilla Gurtubay dictó, por segunda vez, el sobreseimiento provisional, que mi abogado recurrirá. La UDEF ha enviado un informe que es una completa chapuza. Nunca se me ha llamado a declarar. A pesar de todo ello, se confirma que el PP no existe (jurídicamente no existe en toda la Comunidad Valenciana). Lo declara el tesorero, Justino Delgado. Pero la jueza no quiere investigar más. Detecta apropiación indebida pero no sabe a quién imputársela. No ha hecho su trabajo ni malditas las ganas que tiene de hacerlo. Si no hubiera abogados abnegados y éticos y amigos, toda esta dilación sería enormemente gravosa y para toparse siempre contra el muro de la Justicia politizada.
El lunes publicamos una entrevista con Miguel Bernad Remón, que con Manos Limpias, ha denunciado la corrupción: ha pasado por ello ocho meses en prisión preventiva. Manos Limpias ha entrado en concurso de acreedores y ha tenido que cerrar su sede en Madrid. Denunciar la corrupción es hasta peligroso.
Lo que abruma en el caso Bono es su evidencia y su impunidad. Bono entró en política presumiendo de su nula fortuna y de sus muchas deudas. Las deudas siguen constando en sus declaraciones en las Cortes de Castilla-La Mancha hasta el año 2000, y en unos pocos años aflora con un patrimonio inmobiliario ingente:
1.- Chalet de Olías del Rey.
2.- Dos áticos de lujo en Estepona.
3.- Local en pleno centro de Albacete de la joyería Tous.
4.- Piso en El Campello (Alicante).
5.- Chalet en el Vergel de Vargas.
6.- Ático en la C/ Velázquez de Madrid, con vistas a El Retiro, adquirido por el 1,6 millones de euros.
7.- Piso en el Madrid de los Austrias, C/ San Justo, 1, adquirido por 1 millón de euros.
8.- Hípica Almenara: 170.000 m2 con 18.000 construidos.
Consta la recepción de regalos como cohecho propio e impropio, a cargo de Rafael Santamaría, de Reyal Urbis, empresa que hoy encabeza la lista de morosos a Hacienda, como la habitación de la hija pequeña, Sofía, en el chalet de Olías, o caballos para el hijo, como Farceur du Houl, por valor de 200.000 euros (El Confidencial publicó que Bono movió ese dinero en billetes de 500 envueltos en papel de periódico).
Este patrimonio inmobiliario, visible, supera los 11 millones de euros, que no han salido de los sueldos de Bono, sino de la depredación caciquil de Castilla-La Mancha. Ya hablaremos de Caja Castilla-La Mancha, de Seseña y del aeropuerto de Ciudad Real.
He hablado con numerosos medianos y pequeños empresarios de Castilla-La Mancha. Tengo toda la documentación por si algún Juzgado algún día muestra interés (lo terminarán mostrando, el sistema está muerto). La piscina de Olías se la regalaron. En Hípica Almenara no ha puesto un euro. Onde 2000 solo trabajaba para Bono y éste no pagaba.
Pero, por ahora, Bono es un intocable, al que el Supremo se negó a investigarle. ¿Por qué? Bono es una pieza clave del sistema. Ha de saber, controló el CNI como ministro de Defensa, mucho de los demás, pero, sobre todo, muestra toda la inmundicia y la hipocresía del sistema. En Castilla-La Mancha todo el mundo sabe y teme. Bono sigue siendo el hombre al que Pablo Iglesias acude a rendir pleitesía en el chalet de Olías, que promueve la abstención socialista en la investidura de Rajoy o que, con total desparpajo y desfachatez, proclama que se ha llevado a casa –ha robado- documentos del Ministerio de Defensa relativos al Yak-42, sin que pase nada. ¡Ah!, y que sigue cobrando del Presupuesto público como expresidente de Castilla-La Mancha, con los votos del PSOE y de Podemos.
http://ramblalibre.com/2017/01/23/caso-bono-1-la-auditoria-del-santander-bahamas-international-limited/
http://ramblalibre.com/2017/01/24/caso-bono-2-la-abultada-cuenta-de-el-paellas-y-el-bombillas/