Miguel Sempere
El 70% de los jubilados españoles no tienen otro ingreso que la pensión, cuya hucha ha sido esquilmada –con ella se ha pagado la extraordinaria de los funcionarios, en período preelectoral- y que tiene fecha de caducidad: diciembre de 2017.
No hay dinero para las pensiones pero sí para pagar al multimillonario José Bono un sueldo vitalicio de 11.000 euros mensuales en calidad de expresidente de Castilla-La Mancha. Así como cargar al contribuyente con dos secretarias, oficina en Toledo, coche oficial y chófer. Estas prebendas han sido mantenidas tanto por el PSOE –el presidente de la Junta, Emiliano García Page, es conocido como el “sobrino de Bono”- como por Podemos. José Bono actuó de mediador para concertar una cita entre Pablo Iglesias y José Luis Rodríguez Zapatero en el chalet de Bono en Olías del Rey, uno de los inmuebles de su extenso patrimonio valorado en más de once millones de euros y que es titular de una cuenta en una filial del Banco de Santander en Bahamas, junto con su consuegro Raphael, de 160 millones de euros.
Bono tiene un patrimonio inmobiliario visible superior a los 11 millones de euros