Jack Phillips.
El expresidente Donald Trump ganó cómodamente el sábado en tres estados, lo que le otorgó aún más delegados para la nominación presidencial del GOP.
Idaho y Missouri celebraron elecciones primarias y el presidente Trump obtuvo la mayoría de los delegados de los dos estados. En Michigan, los republicanos en una convención de Grand Rapids le otorgaron al expresidente todos los delegados que podían asignarse, además de los 12 delegados generales que ganó la semana pasada en las primarias.
En el caso de Idaho, se preveía que el presidente Trump ganara los 32 delegados que podía ofrecer el estado. Tras la contienda de Michigan, ganó 54.
En particular, el presidente Trump obtuvo el 68 por ciento de los votos, en comparación con el 27 por ciento de la exembajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, en Michigan, según Reuters.
Pete Hoekstra, presidente del Partido Republicano de Michigan, calificó su triunfo como una “victoria abrumadora y dominante”.
El resultado fue aún más claro en Idaho. El 45° presidente se llevó a casa alrededor del 84 por ciento de los votos en las primarias, en comparación con el 13 por ciento de la Sra. Haley. El gobernador de Florida, Ron DeSantis, obtuvo más del 1 por ciento a pesar de haber abandonado y dado su respaldo al presidente Trump hace pocas semanas.
Esto significa que el presidente Trump tiene ahora 244 delegados. La Sra. Haley, la única contrincante del expresidente en las primarias, solo tiene 24 hasta ahora, lo que significa que el expresidente tiene más de 10 veces su número de delegados.
Un candidato necesita conseguir 1215 delegados para recibir la nominación presidencial republicana.
El sábado no hubo asambleas electorales demócratas.
Con victorias en Iowa, New Hampshire, las Islas Vírgenes de Estados Unidos, Carolina del Sur, Michigan, Idaho y Missouri, el presidente Trump es de lejos el favorito en la carrera, con la Sra. Haley aguantando gracias al apoyo de su mayoría de donantes anti-Trump. En Nevada, donde el expresidente no apareció en la boleta, los votantes eligieron abrumadoramente “ninguno sobre los anteriores” en lugar de la Sra. Haley o cualquier otro candidato republicano.
También sugiere que la Sra. Haley se está quedando rápidamente sin tiempo para disminuir su déficit en la carrera de nominación republicana. Pero ella se ha comprometido a permanecer en la carrera hasta después del Supermartes, incluso después de sufrir derrotas en todos los estados hasta ahora.
El próximo evento del calendario republicano es en el Distrito de Columbia. Dos días después, llega el supermartes, uno de los días más importantes del calendario electoral de 2024.
Ese día, el 5 de marzo, 16 estados celebrarán primarias y los analistas dicen que el presidente Trump está en camino de asegurarse la nominación apenas unos días después.
Reacciones
Si bien el presidente Trump no comentó públicamente sobre las elecciones del sábado, Haley pareció pasar a la ofensiva el domingo.
Durante un acto de campaña el domingo, la exgobernadora de Carolina del Sur afirmó que la campaña del expresidente amenazó a la gente en Washington, DC, por no votar por él. Ella estaba reaccionando a un informe de Politico, citando a un presunto funcionario anónimo de Trump, afirmando que la campaña de Trump rastrearía a las personas y cómo votaron en el distrito.
“No es así como se ganan las elecciones”, le dijo a la prensa. “Se trata de candidatos que quieren que la gente se una a su redil, sin amenazarlos, sin expulsarlos de su club. ¿Es eso lo que queremos como líder? La mayoría de estas personas te dirán que no, que ya terminaron con eso”.
En los últimos días, Haley ha intensificado su retórica contra su exjefe mientras lucha por ganar terreno.
También el domingo, la exembajadora dijo que ya no está obligada por el compromiso del Comité Nacional Republicano (RNC) de respaldar al presidente Trump si gana la nominación.
La candidata presidencial republicana Nikki Haley habla en un evento de campaña en la Universidad Clemson, en Greenville, en Greenville, Carolina del Sur, el 20 de febrero de 2024.
Durante una entrevista de NBC, la moderadora Kristin Welker le preguntó a la Sra. Haley: “¿Entonces ya no estás sujeta a esa promesa?”
“No, creo que tomaré la decisión que quiero tomar, pero eso no es algo en lo que estoy pensando”, dijo, y agregó que “si hablas de un respaldo, estás hablando de una pérdida. No pienso así”.
Y continuó: “Cuando estás en una carrera, no piensas en perder. Piensas en seguir adelante”. Más tarde, la Sra. Haley criticó al RNC y afirmó que la organización “ya no es el mismo RNC” y “ahora es el RNC de Trump”.
Mientras tanto, los integrantes de la campaña de Trump le han sugerido a Haley que abandone la carrera electoral. “No puede nombrar un estado en el que pueda ganar, y mucho menos ser competitiva”, dijo el portavoz Steven Cheung en una declaración reciente a los medios de comunicación.
En cuanto al propio expresidente, el sábado le dijo a una multitud en Carolina del Norte que la Sra. Haley es similar a la expresidenta Nancy Pelosi (D-Calif.). “Las junto porque son intercambiables en mi mente”, dijo. “Excepto que tengo que decir, no debería decir esto de una semi-republicana, pero creo que Pelosi es probablemente un poco más inteligente, en realidad”.