Enrique de Diego.
Recuerdo -uno se hace mayor y le da por tener recuerdos- que quedé a comer a los pocos meses de dejar de ser ministro del Interior con Jaime Mayor Oreja, que había liderado a la nación durante el terrible cautiverio de Miguel Ángel Blanco, había visto y propiciado nacer el espíritu de Ermua, y de pronto me dijo en confidencia, más o menos: ‘no es que no te llame nadie, no es que no te suene el teféono, es que desde que dejas de ser ministro parece que empequeñeces».
Y Jaime Mayor Oreja era y es un estadista a tu lado Irene Montero. Están clavadas tres cruces en el Monte del Olvido de Galapagar, que son la de Irene Montero, la ya ex concejala Pilar García y la de Jorge Ponce, un argentino que pretende dar lecciones cuando tiene a su nación hecha unos kirtchner. digo, hecha unos zorros, un pseudo intelectual y un pseudo ideólogo padre putativo en España de las cárceles de 15 minutos. Pardillo, totalitario.
Los tres están unidos por Galapagar. En la caída de los tres ha tenido mucho que ver el correspnsal en Galapagar que se esconde bajo el pseudónimo Javier de la Calle al que los galapagareños le deben un monumento por todo su trabajo bien hecho y por el bien que ha hecho quitando de en medio a estos tres personajillos. Pilar Martínez empezó una persecución despiadada contra él, que la ha llevado al desastre. Le hemos dado ya el Premio Pulitzer porque se lo merece ampliamente. Ha hecho una gran contribución más allá del deber a la información, a la libertad, a la libertad de expresión, a los derechos humanoas y la Patria. Puesta Galapagar-La Navata en el epicentro de los ataques genocidas globalistas, él ha sido un valladar y un bastión. Todos le debemos mucho.
Como tú, Irene Moentero, te tienes merecido todo lo que te va a venir. La soledad, el teléfono que no suena ni a la de tres, el vacío existencial. los amigos de ocasión que no comparecen, el gran movimiento feminista que te ha dejado sola, que te ha diabolizado y te ha convertido en el chivo expiatorio, la cuidadora que ya no la puedes poner con cargo al presupuesto, te van a empeñecer mucho, hasta ser la pigmea moral que eres en realidad.
Todas esas bobadas con énfasis de degenerada que has dicho se volverán contra ti, sobre todo esa terrible promoción de la pedofilia que es una campaña mundial de los degenerados multimillonarios, tus amos. Esos que has servido porque la ley del sí es sí no ha sido un error, poner violadores en las calles es una estrategia de los globalistas para deteriorar la seguridad ciudadana y mantener el discurso de la ideología cochambrosa de la ideología de género.
Pablo Iglesias, otro jueguete roto, no durará contigo, ya te lo vaticino. Y tus hijos se levantarán contra tus desmanes. Has llegado demasiado pronto al Ministerio que nadie te va a agradecer, y es un signo de los tiempos que el Ministerio de Igualdad, hace poco era copiado, y hoy es maldito. Eres demasiado joven para vivir de recuerdos y de la herencia de tu padre. El mundo satánico por el que tú has apostado y que te han enseñado en esa cloaca de facultad, psicología, que no sirve para nada, es así de perro. Te quedan unas fotos ajadas y malditas. Y el 80% de un sueldo que nunca debiste tener. Requiem por Irene Montero. Ya no levantarás cabeza. Serás una figura incómoda en las manifestaciones degeneradas del 8 de marzo. Serás un pasado triste.
Pilar García es imposiible que se empequeñezca más con 234 votos, lo bueno es que conoce a todos los que te han votado. Volverás a tu ociosidad y nadie le importará si tienes «ganitas» o no, prepotente flatulenta. Has amargado a tus vecinos con tus ganas de figurar y tú insoportable mediocridad. Estás muerta y enterrada políticamente, como tu partido, detritus de todas las pocilgas globalistas. Lo mejor es que te encierres en Parquelagos y que no salgas.
Al fin y al cabo, eras partidaria de encerrar a tus vecinos en una cárcel de 15 minutos, la que predicaba tu bizarro veino Jorge Ponce Dawson, que ya creía el rey del mambo cuando no es más que un totalitario de tomo y lomo, un carcelero con ínfulas, un aspiranmte a verdugo con un discurso atorrante y patético. En coherencia -el resumen de las elecciones en Galapagar está muy bien reflejado en el titular de la crónica de nuestro Pulitzer: «Galapagar: Ridículo histórico del equipo de Gobierno saliente y su delirante propuesta de la cárcel de 15 minutos»- lo lógico es que tú te encierres en los límites de lo que andas en 15 minutos, que es lo que querías hacer como martirio calentologo a tus vecinos. Encierrate, pero ya, que no se te vea por la ciudad. Miserable, fracasado.