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Carta al lameculos Mario Picazo: Date unos tragos de lo que sueltan los aviones asesinos

Redacción




Enrique de Diego.

Perdona, majete, pero no te conozco, Mario Picazo, y debes ser famoso o famosete porque debes salir en alguna televisión como «hombre del tiempo«, pero no veo la mierda de la televisión y recomiendo vivamente a todos que hagan lo propio, porque estamos en guerra y es un arma de mentira y propaganda del enemigo. Eres, lo que se dice, un lameculos adiestrado, sin ninguna credibilidad como todos los de esa fábrica de mentiras al por mayor y a mayor gloria de Black Rock. Así que has dado carta de naturaleza a este infame atentado ecológico que se perpetra a diario, durante meses, majete, chiquilicuatre, y la gente te ha tomado a guasa y ha interpretado lo contrario de lo que afirmas en tu deleznable twitter-

Dices sin sonrojo, porque tú lo vales: «Estos días los cielos han lucido numerosas estelas en todas direcciones (aquó pones un avioncito) ¿resultado de una conspiración global para fumigar la raza humana y manipular el clima? NO ¿resultado de unas condiciones atmosféricas favorables para la condensación del vapor de los aviones? Sí». A cagar a Galapagar, alma de cántaro, que no cuela el burdo dogmatismo. A otro con tus rollos: Primero, no es los últimos días, sino en los últimos meses. Segundo, yo te pondría a beber de las toberas de los aviones, o unos tragitos de esa condensación de vapor. A ver cómo se te queda el cuerpo.

¿Por qué no nos explicas, garrulo, tiralevitas, abrazafarolas, cuáles son esas «condiciones atmosféricas favorables» que se dan todos los días durante meses y que engorrinan el cielo y no cae ni una gota de agua de esa condensación del vapor que, ya digo, porque tú lo vales, se produce? Diles a tus asquerosos amos que ya no cuelan sus mentiras, que vamos a por ellos, y a por los lacayos mentirosos como tú. Que sabemos lo que están haciendo y lo que pretenden, que esto es una guerra a muerte por la supervivencia. Y sí, es «una conspiración global para fumigar la raza humana y manipular el clima», que nos quieren matar de sed, y Perico Sánchez y la madastra de Cenicienta, la Teresa Ribera, encima se dedican, para redondear la faena, a destruir embalses, como unos pérfidos lacayos que son, con ínfulas de sicarios, y quieren monopolizar el agua, pero no les va a salir, se les va a volver del revés, porque ya todo el mundo se ha dado cuenta y os la tiene jurada, menos cuatro viejecitas que están aterroizados desde que las confinasteis y la pusistéis timo vacunas mentirosas, veneno de muerte. Y la gente brama y jura en arameo y crece el mar de fondo contra estos criminales y los dogmatismos de la mentira, como tú Mario Picazo. Y se encrespan los ánimos y crece la ira y la gente ya sabe que ellos o nosotros o vosotros, Marietes.