Luis Bru.
Cumpliendo una promesa, nuestro Editor, Enrique de Diego ha presentado denuncia por el asesinato ecológico que se prepetra con los #chemtrails, lo que ya es un clamor en la ciudadanía que habla de los «avioncitos» que provocan la sequía.
La denuncia presentada en el SEPRONA ante el Cuartel de la Guardia Civil de Elche dice que Enrique de Diego «de profesión Periodista, quiero denunciar que se está provocando intencionadamente la sequía con la fumigación por aviones de los llamados chemtrails o estelas químicas. Esos aviones son fácilmente visibles todos los días en el cielo de Elche y lanzan a la atmósfera aluminio, el secante higroscópico más barato y más extendido en manipulación climática».
«Nazet Morgade, referencia en la denuncia de geoingeniería, declara al digital Rambla Libre, de amplia audiencia, y del que soy editor, que “hemos obtenido resultados de laboratorio de hasta cinco mil veces más aluminio de lo normal en el agua, además que en la naturaleza el aluminio no se encuentra en escamas, ya que eso solamente obedece a un proceso industrial”. Además se fumiga a nuestros campos y a las gentes como si fueran ratas con estroncio, bario, litio y grafeno, constituyendo un grave atentado contra la salud, pues producen enfermedades respiratorias».
«Algunos días son tan abundantes estos vuelos delictivos y asesinos que, como ayer, los coches aparecen impregnados de un polvo blanco».
«Por fuentes periodísticas que no puedo revelar, amparado en el secreto profesional, consagrado en la Constitución española, algunos de esos vuelos salen del aeropuerto de Churriana, Málaga».
«Intereso del SEPRONA que ponga coto a esta actividad delictiva y detenga a quienes la ponen en práctica. El SEPRONA tiene las competencias en medio ambiente. Es, por tanto, el instrumento adecuado para perseguir este atentado ecológico. Y por su despliegue nacional debe investigar de dónde parten los aviones y quién los contrata o dirige».
«Se adjuntan fotografías de esta criminal actividad que es una práctica claramente delictiva y generalizada que ponen en práctica en toda España, con el fin de provocar la sequía, imponer una sensación de cambio climático y conseguir el monopolio del agua».
«Solicito que se me mantenga informado, como es preceptivo, de los resultados de la investigación».
«Cumplo así la obligación de todo ciudadano de denuncia de un delito, siendo este patente y clamoroso».
Enrique de Diego nos cuenta la anécdota del día: «el guardia civil que ha recibido la denuncia sabía de lo que se trataba, y juntos hemos mirado al cielo para ver los #chemtrails. Me ha dicho que ‘nos quedan cuatro días’ y ha añadido que todas las noches lee la Biblia. La he dicho que ‘no van ganar. Va a ganar San Miguel’. Próxima parada, denuncia en el Juzgado».