AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños


El lacayo Iker Jiménez trata la REPENTINITIS causada por las timo vacunas

Redacción




Luis Bru.

Iker Jiménez es un lacayo que va de transgresor y cose las costuras del sistema genocida y es un lameculos de los poderosos criminales. Su programa Horizonte se atrevió a tratar, a ver si tienes cojones, que le dicen por la calle, la sobremortalidad clamorosa del panel MoMo del Instituto de Salud Carlos III. Está adiestrado para legitimar la sistema tratando los temas que la cloaca televisiva no se atreve casi a mencionar, pero tras dar pases de pecho se desinfla en la inanidad y en la inconsistencia y blanquea a la casta, que es quien le paga.

Tiene un estilo de manipulación bien conocido: lleva a unos «expertos» a los que califica de «eminencias» y él se presenta como un humilde ignorante. Ese estilo le sirve para no comprometerse y ya de usado se ha vuelto estomagante.

Lo positivo es que la sobremortalidad se trató en televisión, que se hizo porque no se puede más y es un clamor popular que está directamente relacionado con las timo vacunas, fuera de eso la explicación entra dentro de la parapsicología, del misterio, o de marear la perdiz, y es lo que hizo su programa Horizonte, con unas eminencias que no saben de nada pues no saben dar explicación de la REPENTINIIS que asola a la población en todos los segmentos de edad; la muerte súbita fulminante que da a los deportistas, a los jóvenes, a los niños.

Veamos algo positivo en el programa Horizonte del lacayo: en el aire quedó la pregunta angustiada de por qué se ha timo vacunado a los niños, que no tenían ningún riesgo, y sacó a colación los desarreglos de la menstruación en un porcentaje elevado de las mujeres, que es, oficialmente, un efecto adverso de las vacunas, y que puede haber provocado su esterilidad, aunque eso no se citó.

NO TE LO PIERDAS:   Caras de las víctimas de las timo vacunas que piden respuestas

Iker Jiménez, lacayo vergonzante y vergonzoso, te queda mucho camino por andar, pero ten cuidado porque, de seguro, te va a ahogar el tsunami que crece del mar de fondo contra los globalistas malthusianos.