Javier de la Calle.
Entre los días 8 y 14 de septiembre se están celebrando las fiestas patronales de Galapagar, motivo por el que el alcalde y la concejala de seguridad han aprovechado para vender humo, como es costumbre en estos dos personajes, y vender a los cuatro vientos, como hicieron en redes sociales, que han establecido lo que llaman “primer Plan Integral de Seguridad y Emergencias para las Fiestas Patronales”, como si en los años anteriores no hubiesen habido planes de seguridad y ellos hubieran inventado la rueda, cuando no solo los ha habido, sino que han sido infinitamente mejores y ofrecido más seguridad.
Pero vamos a analizar la realidad de este Plan Integral de Seguridad y entrar en algunos detalles tanto de la chapuza, como veremos a continuación, como de la reacción ante posibles riesgos, como ha ocurrido y ocurre, así con de la sinrazón de algunas situaciones que dan la sensación que lejos de querer prevenir la desgracia lo que se provocase fuese lo contrario.
SIN CONTROL DE VEHÍCULOS EN LOS PERÍMETROS DE SEGURIDAD Y SIN BARRERAS ANTIINTRUSIÓN QUE EVITEN ARROLLAMIENTOS
Aquí se roza el insulto al concepto seguridad y deja en evidencia no solo a la Concejalía de Seguridad, sino a toda la Junta Local de Seguridad que tanto se autofelicitaba en RR.SS. por esta chapuza. Resulta que aun habiendo advertido vecinos en RR.SS., donde interactúan los concejales y el alcalde, que no se estaban solicitando las matrículas de los vehículos de los residentes en las calles que se encuentran dentro del perímetro de seguridad de la feria, ya que solo hay policías locales por la tarde y nadie puede controlar si aparcan un vehículo en esas calles que luego pudiera ser utilizado por un “lobo solitario” para arrollar gente en la feria en un atentado, la concejala de seguridad, Mercedes Nuño (Cs), no ha tenido el sentido común mínimo de ordenar que se efectuase un listado de esos vehículos, con el fin de que antes de comenzar cada tarde la feria una patrulla comprobase la zona y de haber un vehículo extraño lo retirara la grúa por seguridad, ya que en la DGT no todos los vehículos están empadronados en las viviendas (renting, alquiler o empadronados en otra población).
Los propios vecinos llamaron tanto a la Policía Local como al 112 para alertar de la presencia de una gran cantidad de vehículos que no eran de la zona y que se habían saltado la prohibición de acceso a la misma excepto para residentes, no siendo retirado ni multado ni un solo vehículo, repitiéndose cada día la secuencia, con el riesgo que eso ha conllevado de atentado ante el desprecio hacia las normas básicas de seguridad en plena Alerta 4 Antiterrorista.
Pero la inconsciencia y temeridad de este Equipo de Gobierno y el desprecio al nivel 4 de la Alerta Antiterrorista no ha quedado en lo que relatamos, la propia entrada a la calle de la feria y de la zona de fiestas donde hay miles de personas cada noche de fiestas solo ha tenido un simple vallado de metal y ninguna barrera física capaz de frenar la intrusión de un vehículo que quisiera atentar o como el “accidente” de las fiestas de Colmenarejo (junto a Galapagar) de julio de 2018, donde una persona entró en la feria y arrolló a varias personas, hiriendo de gravedad, entre otros, a un niño de 5 años.
No podemos dejar de recordar que con el anterior Equipo de Gobierno sí había barreras físicas (grandes y pesadas jardineras de piedra en zig zag) en cada acceso a estas zonas, dificultando todo lo posible este tipo de intrusiones.
VIOLENCIA MACHISTA: ¿PREVENCIÓN O FACILIDAD PARA QUE OCURRA UNA DESGRACIA CON ESTA CHAPUZA DEL “PRIMER PLAN INTEGRAL DE SEGURIDAD”?
Es aquí donde la lógica se extravía del todo y uno se pregunta si esto es real y consecuencia de la incapacidad funcional del equipo de gobierno, una broma de mal gusto o se busca que haya una agresión sexual para luego tener el minuto de protagonismo con la parafernalia habitual y ya poder justificar más chiringuitos, ya que en Galapagar ese problema no existe a día de hoy.
Han colocado los clásicos puntos violetas en la puerta del Ayuntamiento, pero solo hasta las 02.00 horas, que desde esa hora parece que ya no se agrede a las mujeres, aunque haya gente de fiesta y bebida hasta las 06 horas.
Pero lo más grotesco de todo es que el mayor parque de Galapagar, El Toril, que está a escasos 100 metros de ese inservible Punto Violeta, no solo ha permanecido abierto todas las noches de las fiestas, sino que ha permanecido todas las noches a oscuras, multiplicando peligrosamente el riesgo de agresiones sexuales, asaltos y agresiones con arma blanca y que nadie pueda verlo para ayudar o avisar a las FCS, aunque de acudir las FCS ya me dirán cómo van a poder hacer su trabajo a oscuras, sencillamente una temeridad por parte de Ayuntamiento que deja en evidencia tanto a la concejala de seguridad y su incapacidad funcional para el cargo, como ese pionero primer “Plan Integral de Seguridad y Emergencias para las Fiestas Patronales” y lo acordado en esa Junta Local de Seguridad.
Vecinos se han acercado al Punto Violeta para preguntar los motivos de estar el parque abierto y a oscuras total y la respuesta es que no saben nada y que están solo para ofrecer información, ¡¡Toma ya el interés real en prevenir!!, pero ni una sola de las concejalas de la oposición de IU, Podemos o Más Madrid, que tanto se les llena la boca de defender a las mujeres de estas agresiones, han dicho nada al respecto. Solo VOX Galapagar ha emitido un tuit denunciando la situación y ha sido ignorado por el Ayuntamiento de Galapagar.
.
El parque El Toril ha permanecido repleto de jóvenes haciendo botellón, algo que es como echar más leña al fuego, es decir que la imprudencia de la Concejalía de Seguridad podría haber costado muy caro. A ver qué excusa nos dan la concejala de seguridad y el alcalde, aunque el alcalde (alías El Florero entre vecinos, incluso circula el hashtag #AlcaldeFlorero, en referencia a lo que ha sido su figura como alcalde esta legislatura) hará lo habitual y que lleva haciendo toda la legislatura como tarjeta de presentación, es decir lo que le ordenen los concejales de Cs.
Además de las molestias que están sufriendo los vecinos de las calles junto a la feria, donde algunos tienen pegadas las atracciones a sus viviendas, han tenido que sufrir también hasta las 6 de la madrugada los botellones con altavoces y música a todo volumen, ante la pasividad y permisividad del Ayuntamiento y las FCS.
La propia Delegada del Gobierno en Madrid aseguraba en RR.SS. que la Guardia Civil iban a participar en las fiestas 225 guardias civiles a una media de 32 al día (suponemos que en los 3 turnos de mañana, tarde y noche) lo que serían 10 por turno para una población de 35.000 habitantes y de ellos miles en las fiestas, simplemente insuficiente y una hiperbolización para maquillar la chapuza y ofrecer una sensación falsa de seguridad.
De hecho, en la noche de más afluencia, la del sábado día 10, hubo la pelea más grande en la misma plaza del pueblo y, según nos cuentan vecinos que allí se encontraban, no había ni un guardia civil o policía local que interviniera y que los agentes brillaron por su ausencia en la zona de mayor afluencia.
Queremos decir a los vecinos de Galapagar que el “primer Plan Integral de Seguridad y Emergencias para las Fiestas Patronales” del que tanto alardeó el alcalde y la concejala de seguridad ha sido una chapuza y una temeridad y han expuesto a un riesgo real, en plena Alerta 4 Antiterrorista, a todos los vecinos que han acudido a las fiestas, confiados en algo de este calibre, esa es la realidad.