Durante los últimos meses, los medios occidentales han estado fabricando propaganda salvaje sobre las tropas rusas que cometen atrocidades extremas contra los civiles en Ucrania. Una afirmación falsa ahora desacreditada alegaba que hay “una campaña sistémica y coordinada de violencia sexual” por parte de soldados rusos contra mujeres ucranianas.
Resulta que todo es falso. Y el tipo que difundió esta mentira, un alto representante de los «derechos humanos» de Ucrania, ahora ha sido despedido por ello.
Lyudmyla Denisova inventó una historia sobre 25 adolescentes que supuestamente fueron violadas en grupo por las tropas rusas, lo que resultó en que nueve de ellas quedaran embarazadas. Se dijo que el incidente falso ocurrió en un sótano en Bucha. Las mujeres mayores también afirmaron que ellas también fueron violadas, junto con niños pequeños.
TIME y otros medios de propaganda de izquierda publicaron estas y otras historias, que se volvieron cada vez más sensacionalistas y exageradas hasta que finalmente fueron cortadas de raíz. Como de costumbre, los medios occidentales no tenían más pruebas que los rumores, lo que parece ser el nuevo estándar del «periodismo» en este país.
Resulta que Denisova era una figura central que alimentaba a los medios occidentales historias extravagantes de violaciones que aparentemente inventó sobre la marcha. Y ahora las gallinas han vuelto a casa para dormir por Denisova, ya que queda expuesta por difundir mentiras sobre presuntos crímenes de guerra que nunca ocurrieron.
¿Qué otras mentiras nos dicen los medios occidentales sobre Rusia?
El objetivo de Denisova era pintar a los rusos como «animales» que violentamente violan y dañan todo lo que ven. Incluso hubo afirmaciones falsas de que los soldados rusos estaban comiendo perros callejeros, lo que fue otro intento de deshumanizarlos y galvanizar el apoyo occidental a Ucrania en este conflicto.
Según el blog de análisis geopolítico Moon of Alabama , varias organizaciones no gubernamentales (ONG) en Ucrania estaban a la caza de nuevo dinero «occidental» para canalizar sus proyectos de «consulta y recuperación de violaciones». Sin embargo, cuando buscaron casos de violación en la vida real para presentar su caso, no pudieron encontrar ninguno.
Aparentemente, estas ONG recurrieron a inventar acusaciones de violación, que Denisova luego difundió a los medios occidentales. Eventualmente, algunos se dieron cuenta y le escribieron a Denisova solicitando una mejor comunicación con solo aquellos casos que tuvieran evidencia suficiente.
“Los crímenes sexuales durante la guerra son tragedias familiares, un tema traumático difícil, no un tema para publicaciones en el espíritu de la ‘crónica escandalosa’”, dice un llamamiento del 25 de mayo a Denisova pidiéndole que evite el sensacionalismo, los detalles excesivos y otros. contenido cuestionable.
“Debemos tener en cuenta el objetivo: llamar la atención sobre los hechos de los delitos”.
La “violación como herramienta” de guerra por parte de los rusos continuó durante algún tiempo, a pesar de esta petición. Solo ahora está comenzando a desmoronarse visiblemente, exponiendo una vez más a los medios occidentales y sus fuentes en Ucrania como una manada de mentirosos que impulsan una agenda fraudulenta.
“Los legisladores ucranianos despidieron a la defensora del pueblo para los derechos humanos del país, Lyudmyla Denisova, en un voto de censura el martes, y concluyeron que no había cumplido con sus obligaciones, incluida la facilitación de corredores humanitarios y la lucha contra la deportación de ucranianos del territorio ocupado”, se lee en un comunicado. reportaje de The Wall Street Journal .
“El legislador Pavlo Frolov dijo que la Sra. Denisova también fue acusada de hacer declaraciones insensibles y no verificables sobre presuntos delitos sexuales rusos y de pasar demasiado tiempo en Europa occidental durante la invasión”.
Frolov agregó en una publicación de Facebook que el enfoque de Denisova era «poco claro» en lo que respecta a informar los detalles de presuntos «delitos sexuales cometidos de manera antinatural» y la supuesta «violación de niños» por parte de soldados rusos. Resulta que nada de esto podría ser “confirmado por evidencia”.
Fuente: Zero Hedge