La corporación de procesamiento de alimentos Smithfield Foods cerrará su planta de Vernon, California, y reducirá las operaciones en California, Utah y Arizona, anunció la compañía el viernes.
Smithfield “cesará todas las operaciones de cosecha y procesamiento en Vernon, California, a principios de 2023 y, al mismo tiempo, alineará su sistema de producción de cerdos al reducir su hato de cerdas en su región occidental”, dijo la compañía en un comunicado de prensa del viernes .
“Smithfield está tomando estas medidas debido al creciente costo de hacer negocios en California”, dijo la compañía.
“Es cada vez más desafiante operar de manera eficiente allí”, dijo el portavoz de Smithfield Foods, Jim Monroe, al Wall Street Journal . “Nos esforzamos por mantener los costos bajos y mantener los alimentos asequibles”.
Propiedad del conglomerado WH Group con sede en Hong Kong, Smithfield es el procesador de carne de cerdo más grande del país por volumen.
Al igual que otras empresas de alimentos en todo el país, la empresa se vio afectada por una combinación de cadena de suministro y escasez de mano de obra, la inflación récord en curso y la guerra en Ucrania, un importante productor de trigo, que disparó los precios de los cereales en todo el mundo.
Debido a que el grano es un ingrediente crucial en la alimentación del ganado, la inminente escasez de granos también disparó los precios de los alimentos para el ganado, elevando los costos de producción de la planta de California.
Los costos de los servicios públicos en California añadieron sal al daño económico, que, según el vocero de la compañía, fueron 3.5 veces más altos por persona que los de las otras 45 plantas en el país dirigidas por Smithfield.
Además, según Monroe, el entorno regulatorio de California ha dificultado que el procesador de carne de cerdo haga negocios allí.
El portavoz señaló la Proposición 12 , una regla aprobada por los votantes en 2018, que ordenaba que las empresas de procesamiento de alimentos que confinan cerdos y cerdas deben tener espacios adecuados para que los animales se acuesten y se muevan.
La regulación efectivamente hizo que el confinamiento de tales animales en establos más pequeños fuera ilegal, para consternación de los productores de alimentos , quienes señalaron que la regulación aumentaría los costos de los alimentos y los costos de producción.
Además de cerrar la planta de Vernon, la compañía dijo en el comunicado de prensa del viernes que buscaría «opciones estratégicas para salir de sus granjas en Arizona y California», además de reducir su hato de cerdas en Utah.