Ignacio Fernández Candela
La Plataforma Pedro Sánchez, Dimisión no ceja en su empeño de concitar la atención de los ciudadanos indignados con el proceso golpista, por método de implosión, que practica el genocida desgobierno liderado suciamente por un presidente ilegítimo, embustero y que ha traspasado todas las líneas rojas de la sospecha criminal. Desde el 12 de Septiembre, cuando fuimos testigos de la concentración que desembocó en la Plaza de Colón, con inicio en la Puerta del Sol, con decenas de miles de manifestantes ninguneados trampeadamente por las cifras amañadas de medios afines a la corrupción gubernamental, Eduardo Lera y los organizadores de la marcha han trabajado en la continuidad de la protesta que ahora dirige sus objetivos de reivindicación hacia el próximo 6 de Diciembre, emblemático Día de la Constitución.
Con el lema “Por España ¡Hasta aquí hemos llegado!”, se pretende a las 12:00 horas unificar los criterios de la denuncia pública a la que pueden adherirse en manifestación pacífica cuantos, al margen de ideologías, sientan la estafa golpista que desempeña un desgobierno criminal al que , además de provocar un genocidio con la intención de magnificar el dolor para sacar rédito político, se le ha descubierto la pretensión delictiva cuyo fin principal, entre otros muchos secundarios que cubren el código penal, es el derrocamiento de la Corona y la intoxicación sectaria de las instituciones elementales, garantes de nuestra muy trabajada democracia en libertad.
En una rastrera argucia nada casual de acoso y derribo, con el fin de desmantelar el orden constitucional por el que España se ha regido durante cuarenta años, hemos asistido a una ofensiva sostenida contra la identidad y la razón de ser de nuestro país que ha sido institucionalmente ilegítima, desde el momento en que fue tomada con engaño la presidencia por quien debería rendir cuentas judiciales una vez salga por la puerta trasera de la vergüenza con que ocupó La Moncloa.
Al horizonte de la dimisión debería seguirle el carcelario. La huella del zapato democrático debe quedar grabada en la ególatra retaguardia de un cobarde que se mantiene en la guarida presidencial, procurándose toda suerte de artimañas deleznables. No puede quedar impune el daño practicado, máxime cuando ya se conoce en evidencia criminal el alcance de los acuerdos secretos con que el sanchismo pretendió dilatar su dañina ocupación monclovita. Con Sánchez ha caído la credibilidad del PSOE, hasta a nivel internacional, convertido en sospechoso partido de las múltiples criminalidades, junto al independentismo e izquierdismo radical aliados a espaldas del bien común de los españoles.
Son millones los damnificados. El 6 de Diciembre están convocados todos los ciudadanos que perciben la amenaza en sus vidas y familias, la muerte en genocidio de sus seres queridos, viles asesinos de nuestros padres, y la constante manipulación con carroñeras estrategias que buscan imponer un régimen dictatorial, aniquilando la economía nacional e implementando una tenaza sufragada por narcodictaduras que han comprado las voluntades políticas para traicionar a España desde el propio gobierno de la traición histórica que representa el PSOE y los podemitas, a sueldo también de especuladores mundiales sin escrúpulos.
En la incertidumbre de estos tiempos con una España secuestrada por delincuentes disfrazados tras siglas políticas, la resistencia ciudadana es obligada cuando la mayoritaria oposición política desempeña una tibia defensa ante un ataque frontal. Por todo ello la Plataforma Pedro Sánchez, Dimisión toma la iniciativa en busca del despertar de un pueblo dormido, víctima cómoda de una estrategia criminal por la que los responsables deberían ser juzgados si es que la España anestesiada despierta, aunque sea por instinto de supervivencia, de una vez por todas.
