Enrique de Diego.
El Gobierno se verá obligado a rebajar las pensiones hasta el 45%, según el equipo de economistas conformado por Rambla Libre para el análisis de la crisis. Esa será la consecuencia objetiva de la caída de la recaudación y del incremento del gasto público en subsidios de desempleo -aumento de 1.074.000 según la EPA del segundo trimestre- y en ERTES. El Gobierno ya ha pedido a la Unión Europea 20.000 millones para hacer frente a este concepto. Objetiva quiere decir que se sustrae a los buenos sentimientos del Gobierno de no dejar a nadie atrás y entra dentro de la racionalidad de la economía.
Según la Seguridad Social las bajas de pensionistas, algo que sucede por primera vez en la historia, han sido 45.000 en los meses de Febrero, Marzo y Abril, y luego como la media en 2019 y en enero 2020, fue de 8.000 personas mes en alta, la baja total han sido de 45.000 más 8.000 por los tres meses que ya no han sido altas, en total 69.000, que son todos fallecimientos adicionales a los habituales e imputables exclusivamente al coronavirus. Además, existe un 15% de personas mayores de 65 años que no cobran pensión alguna por no haber cotizado nunca, esencialmente mujeres, suponiendo un tasa de mortalidad análoga al 85% restante habría que sumar 10.000 mas al numero de fallecimientos, en total 79.000.
Este colectivo, el de mayores de 65 años, constituye el 90% de los muertos, por lo que el número total en este periodo de tres meses es de 79.000 dividido por 0,9, o sea 88.000 en tres meses o 29.000 al mes. Si suponemos que el mes de mayo será solo la cuarta parte tendríamos 95.000 muertos por el coronavirus en cuatro meses. En el mes de mayo, los pensionistas fueron 8.896.412 y el gasto fue de 9.582,78 millones, con un descenso del 0,27. Sin embargo, como ponen de manifiesto nuestro panel de economistas, con una caída de la recaudación fiscal del 18% y un incremento exponencial de las personas dependientes del Estado, el Gobierno se verá obligado a reducir las pensiones en ese 45% el próximo año.
La pandemia económica pasará una factura muy dura. En conjunto y hasta el 1 de Junio, aparte los 95.000 muertos por la crisis sanitaria, se unen 1,1 millones de empleos perdidos, 3,5 millones de personas afectadas por un ERTE, 1,4 millones de autónomos sin actividad, y 100.000 empresas cerradas.
Según la OCDE, el descenso del PIB será del de entre el 11,1 y el 14,4$, mientras para el FMi será del 12,8%. La OCDE no prevé entrada en la recuperación. La crisis que está castigando muy severamente al sector turístico deja esas cifras obsoletas y nuestros economistas apuestan por un descenso del PIB entre el 15 y el 18%. En torno al 90% de la población verá reducida drásticamente su renta disponible. Nuestros economistas no consideran que el recurso a la subida de la presión fiscal vaya a repercutir en una mayor recaudación y la subida del IVA frenará el consumo y aumentará la economía sumergida.
El descenso de las pensiones se impone. Ya eran insostenibles con el Gobierno de Mariano Rajoy, y estaban abocadas a un descenso que nuestros expertos sitúan en el 25%. Un agravante de esta situación es que muchas familias dependen de las pensiones para sobrevivir.