AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños


Dina Bousselham, la amante despechada

Redacción




Javier de la Calle.

Empieza a hacerse la luz sobre el ya caso Dina Bousselham y lo que se percibe es viejo como el mundo: Dina actúa como la amante despechada. Nunca le robaron el móvil, ni Pablo Iglesias fue objeto de ninguna conjura de las cloacas del Estado. Mintió y basó la campaña de las generales de 2019 en esa grosera mentira y en Eduardo Inda.

Dina Bousselham, nacida en Tánger, en 1990, alumna de Pablo Iglesias en la Facultad de Políticas de la Universidad Complutense, vivero de Podemos y nido de drogadictos. Conectó con Pablo Iglesias en calidad de miembro de la asociación Juventud sin futuro, aunque ella se lo ha sabido labrar bien, como asistente en el Parlamento europeo y ahora como directora del digital montado por Podemos, y que no tiene mucha audiencia.

Su relación íntima se afirmó en el tiempo que Pablo Iglesias fue eurodiputado, y la compartió con Tania Sánchez, cuyo número de la ruptura fue convenientemente edulcorado para sacar rendimiento político. En cuestiones de faldas, Pablo Iglesias, como buen promiscuo, tiene escasa credibilidad. Lilit Verstrynge lleva una vida paralela a la de Dina.

La historia sólo cuadra si Dina, la amante despechada, fue la que envió a Interviú, siempre receptora de escándalos, hasta su cierre, el pendrive de un móvil que nunca se robó. Lo que contiene son fotos comprometedoras de tono sexual. Eduardo Inda pudo recibirlas también de Dina o de alguien muy próximo a ella. Cuando Antonio Asensio, hijo, le entrega

tarjeta de memoria a Pablo Iglesias éste, que ha cortado la relación con Dina, se la devuelve quemada. Faltan las fotos que Pablo Iglesias considera que le pueden hacer daño.

NO TE LO PIERDAS:   Numerosos agentes del FBI registran la mansión de Donald Trump dentro de una "persecución política"

Pablo Iglesias decide convertir ese episodio cutre, viejo como el mundo, en una cuestión de Estado y en las generales de 2019 las utiliza para vender una gran mentira. Eduardo Inda, el gran vencedor de esta historia, saca pecho en La Sexta Noche, dedicada a ocultar el escabroso culebrón, como el común de los medios controlados por la izquierda: «El mafioso y el delincuente es, presumiblemente, el señor Pablo Iglesias, su antigua asistente, Dina Bousselham y, presumiblemente también algún miembro de la Fiscalía Anticorrupción. Quiero dejarlo claro porque un año después la verdad ha salido a la luz. El señor Iglesias se pasó toda la campaña electoral de 2019 utilizando la palabra Inda, mafia policial, las cloacas y al final ha quedado claro que las cloacas eran Pablo Iglesias, Dina y seguramente dos fiscales».

Las tornas, evidentemente, han cambiado. Se coge a un mentiroso antes que a un cojo y a Pablo Iglesias le han pillado in fraganti delito. Dina, la amante despechada, ya tiene su venganza con sabor agridulce.