AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños


¡Impresentable Pedro J: se olvida de sus hijos!

Redacción




Luis Bru.

¡Impresentable Pedro J! Nunca ha sido tan impresentable como ahora. El año pasado, en la entrega de los premios de El Español, que en su modalidad de empresario del año -la verdadera importante, el que paga- recayó -mala fortuna- en Francisco González, del BBVA, después implicado en el escándalo del comisario José Manuel Villarejo, tuvo especial empeño en que asistieran sus hijos Tristán y Cósima para hacerse la foto con ellos, con la finalidad de dar la imagen de reconciliación o buena sintonía. Así, La Vanguardia dio el tono titulando «Pedro J. Ramírez recupera el apoyo de sus hijos tras su divorcio de Ágatha». La revista Semana tituló: «Pedro J. Ramírez se reconcilia públicamente con sus hijos en los premios de su periódico». Y Ok Diario fue más allá: «La ‘traición’ de Cósima y Tristán a su madre, Agatha Ruiz de la Prada». Estaba lejos de ser tal, pero Cósima (luciendo un traje patriótico que había lucido su madre) y Tristán fueron vilmente utilizados para dar esa impresión. Puesto que se había producido un divorcio traumático, en el que la diseñadora lejos de amilanarse plantó cara, la presencia de los hijos -bastante normal, al fin y al cabo es su padre- fue utilizada por su padre con una finalidad de dar una imagen de normalidad familiar.

Conseguido el objetivo, este año las cosas han sido bien distintas. El premiado ha sido José Ignacio Sánchez Galán, de Iberdrola, el que paga, que de nuevo se ha visto enredado con contratos con el comisario Villarejo. Y mientras en la vez anterior hubo tanto interés que sonaron insistentes los teléfonos cuando se retrasaron los vástagos, y no se inició el festorro hasta que llegaron, este año ni siquiera han sido invitados. Tristán y Cósima ni se han enterado de la entrega de los premios de El Español. Ya no interesaban para la foto que ya no era noticia.

NO TE LO PIERDAS:   “Todo el mundo aborrece a Cruz en la redacción de El Español”

Retrata bastante el egoísmo del personaje, y su falta de escrúpulos morales, esta utilización bastarda de sus hijos para hacerse la foto, con una finalidad concreta y deleznable, y el olvido ulterior de la invitación. Penoso.