Javier de la Calle.
Sacó una barra metálica de un carrito de la compra. Sin motivo alguno, empezó a golpear a Valentina Sánchez, una anciana de 91 años, que paseaba por la calle con su hijo por L’Hospitalet de Llobregat. La agresión se produjo el miércoles. Valentina ha necesitado más de cien punto de sutura en la cabeza, además de tener todo el cuerpo lleno de moratones.
Los Mossos d’Esquadra han informado que el atacante es un hombre de 52 años, natural de Orán (Algeria), con problemas mentales. Fue detenido de inmediato por los agentes e ingresado en la unidad de psiquiatría del Hospital de Bellvitge. La Policía ha explicado que su intención no era matar a la mujer, sino lesionarla. Es incomprensible esta absurda afirmación, cuando la paliza ha sido brutal y no se produjo el óbito porque la gente acudió con prontitud en su ayuda. Será, con todo, un médico forense el que dictamine «si la agresión conlleva algún tipo de responsabilidad penal», según afirman fuentes oficiales.