AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños


Carta a Bergoglio: Callas como una puta babilónica

Redacción




Enrique de Diego.

Por supuesto, nunca rezo por tus intenciones pues son perversas y aviesas, Bergoglio. Tampoco pongo la crucecita ni doy un céntimo de euro en el cepillo de ninguna Iglesia porque se dedicará por esta clerigalla y esta jerarquía a la islamización de las sociedades cristianas y a financiar a los verdugos de los cristianos. Has callado, habéis callado como putas babilónicas ante el exterminio de los cristianos en Siria e Iraq.

Óscar Rodríguez Maradiaga.

Los que mantienen la fe y rezan, que son muchos, a Dios gracias, se encomiendan y veneran a San Juan Pablo II y mantienen un púdico silencio hacia tus desfachateces de payaso. En tu última visita a Irlanda, para celebrar la Jornada de la Familia, no había nadie en las calles para saludarte. No interesas, no interesan tus patochadas de graciosillo ni tus mamarrachadas de dudas metódicas sobre la moral para generar ceremonia de la confusión. Mejor te hubiera estado quedarte en Buenos Aires que venir a Roma en una elección con tantas sospechas de simonía, con ese cojón del anticristo del cardenal de Honduras, Oscar Rodríguez Maradiaga.

Begoglio en Lesbos, despreciando a los cristianos.

No le interesas, ni le eres útil a George Soros y te han acorralado con eso de la pederastia. Eso de meter mano al monaguillo y somodizar al seminarista ha sido una plaga de los clérigos mundanizados, progres de mierda que no rezaban ni rezan ni se mortificaban ni hacen ningún sacrificio, que estaban muy preocupados por los pobres en general, florecidos en el postconcilio y que han  sido y son una plaga satánica; ese humo de Satanás que se había metido en la Iglesia, según la percepción del bueno pero débil Pablo VI. Algunos de los más pervertidos han sido protegidos por ti, acusación tremenda que has sido incapaz de desmentir, porque te votaron en el Cónclave y recogieron votos para ti, que eres un vanidoso proteico.

NO TE LO PIERDAS:   Estos son los 10 libros que debes leer para combatir al Nuevo Orden Mundial
Pintada y flores en el edificio donde violaron y asesinaron a la menor.

Eres, Bergoglio, el obispo de Roma y una de tus feligresas, Desirée Mariottini, de 16 primaveras, ha sido asesinada de una forma espeluznante que eriza el cabello. Durante 10 horas, 10 largas y terribles horas, ha sido pasada de mano en mano por 10 negros, senegaleses, musulmanes, y los tres conceptos son verdad, de esos que tú adoras y proteges –al Dicoutti les mandastes helados, pedazo de degenerado-; durante 10 horas ha sido violada y luego asesinada por tus amigachos, y tú, Bergoglio, callas como una puta babilónica. Ni una condena, ni una muestra de dolor, ni de ti ni de la abyecta Conferencia Episcopal italiana, ese antro de perdición y latrocinio, en la que uno de sus obispos ha llegado a decir que prefiere ver convertidas en mezquitas todas las iglesias antes de que uno de estos pobres senegaleses se ahogue en el Mediterráneo, a donde nadie les ha llamado. ¡Vaya desprecio a Cristo y a la Eucaristía!

Tras violar a Desirée durante 10 largas horas por esos inmigrantes ilegales que tú escondes en las Iglesias como si fueran víctimas cuando son abyectos verdugos, canalla Bergoglio, la han asfixiado para que no gritara. Porque en ese suplicio tendría ganas de gritar, muchas ganas de gritar. O para que no contara nada. Los asesinos no tenían que estar en Italia; los dos detenidos no tenían ningún permiso de residencia, no tenían papeles. Son de los tú, bellaco entre los bellacos, adoras, tus predilectos. Y vivían como okupas en una casa conocida en el barrio de San Lorenzo como “La casa de la droga”, porque es a lo que se dedican al robo y a la droga y hay que echarlos o metértelos a ti, demagogo de cuarta, en el Vaticano, en el mismo salón con los obispos italianos, para ver si sale alguno vivo. Estás consiguiendo, bestia del averno, tú entre otros, que ser mujer en Europa se haya convertido en cuestión de alto riesgo.

NO TE LO PIERDAS:   Bergoglio, el lacayo de las élites
Jorge Bergoglio y Carlos Osoro.

Callas como una puta babilónica, Bergoglio, porque ese terrible crimen es la contradicción de todas tus estupideces. Callas –¡a dónde hemos llegado!- porque sirves al padre de la mentira y el crimen de Desirée es la consecuencia de tus ideas. Eres cómplice moral de ese asesinato y de los que vengan. Eres el peor pastor, llamando de continuo a los lobos para que se coman a las ovejas. Vade retro.