Virginia Montes.
Mentiras y despropósitos. Mentiras oficiales de una clase política y policial que ha desarmado a sus sociedades. En Lübeck, norte de Alemania, un hombre ataca con un objeto punzante de manera indiscrimianda a cuantos paasajeros de un autobús a rebosar. ¿A qué suena? A que es un musulmán…En efecto. Es un iraní que ha obtenido la nacionalidad alemana, pero, de manera sorprendente, las fuentes oficiales se apresuran a decir que no hay indicios de terrorismo. ¿Quién cree a estas alturas a las fuentes oficiales?
Una decena de personas resultaron heridas, una de ellas de gravedad, al atacar un hombre armado con un objeto punzante o cuchillo de cocina a los pasajeros de un autobús que transitaba por la ciudad alemana de Lübeck (norte), según han informado fuentes policiales.
El presunto agresor, que fue detenido poco después por una patrulla policial, es un hombre de unos 30 años y origen iraní, según informaciones coincidentes de la televisión pública regional NDR y el canal informativo NTV.
Desde la Fiscalía se indicó que el atacante tiene la nacionalidad alemana, aunque no es nacido en el país, al tiempo que se pedía comprensión ante la imposibilidad de dar más detalles hasta que se haya podido comprobar con total seguridad su identidad. Les fuentes policiales confirmaron únicamente que había quedado detenido y que se investiga el contenido de una mochila abandonada que quedó en el autobús.
Según informaciones de testigos recogidos por NTV, el ataque se produjo cuando el autobús estaba lleno a rebosar de pasajeros que se dirigían a la localidad vecina de Travemünde, donde este viernes comienzan unas populares fiestas locales. El conductor del vehículo abrió rápidamente las puertas en cuanto se produjo la agresión para dejar que los pasajeros se pusieran a salvo.
La cadena de televisión NTV añade que, según algunos pasajeros, de la mochila surgía alguna sustancia o humo, extremo éste no confirmado por las autoridades. Unos agentes policiales que se encontraban en la zona procedieron a detener poco después al agresor, al que habían logrado reducir un grupo de pasajeros.