Enrique de Diego.
Hace bastantes años, los periodistas perspicaces que venían de Cataluña insistían en que dentro del PSC había una persona inteligente y con la mente clara. Miquel Iceta, entonces escondido en posiciones secundarias del aparato. Ahora, en primera línea, como secretario general del PSC hay que decir que lo está bordando, a la altura de las circunstancias y como un patriota.
Autonomista convencido, Miquel Iceta ha sabido percibir que el referéndum era una trampa democrática para llevar a la sociedad catalana al conflicto. Los alcaldes socialistas han sido los que han plantado clara a una deriva totalitaria que se presenta adornada de toneladas de sensiblería. Notoriamente, ha frenado las veleidades de Pedro Sánchez y está mostrando una gran fortaleza de ánimo y claridad en el análisis.
Mi reconocimiento a Miquel Iceta, que está brillando sobre el paisaje gris del momento.