Virginia Montes
Donald Trump en presidente ante el Congreso con una llamada a esa América grande, optimista con “un nuevo orgullo nacional”.
“La antorcha está ahora en nuestras manos. Y la usaremos para iluminar al mundo. Estoy aquí esta noche para entregar un mensaje de unidad y fuerza”. Así se ha presentado esta noche Donald Trump en su primer discurso en el Capitolio, en el que ha proclamado la eclosión de “un nuevo orgullo nacional” que, a su juicio trae “una oleada de optimismo y coloca los sueños imposibles firmemente a nuestro alcance”.
Su discurso fue una reivindicación de su agenda antiglobalización, reconstruir las infraestructuras del país, rearmar al Ejército y bajar drásticamente los impuestos, y, por supuesto, desmantelar el Obamacare.
“Estoy pidiendo a todos los ciudadanos que abracen esta Renovación del Espíritu Americano. Les pido a todos los miembros del Congreso que se unan a mí para soñar algo grande para nuestro país”.
“Mientras hablamos, estamos eliminando pandillas de narcotraficantes y criminales que amenazan a nuestras comunidades. Creo que es posible una reforma migratoria real y positiva, siempre y cuando nos enfoquemos en los siguientes objetivos: mejorar los empleos y los salarios de los estadounidenses, fortalecer la seguridad de nuestra nación y restablecer el respeto a nuestras leyes”.