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Merkel kaput

Redacción




Ángela Merkel. /Foto: Taringa.net.
Ángela Merkel. /Foto: Taringa.net.

Virginia Montes

Alternativa por Alemania no sólo ha venido para quedarse, sino para subir. El 14% obtenido en la progresista Berlín, capital de la corrección política, ahora resquebrajada, ha puesto de los nervios al ala dura de la CDU que percibe la incapacidad de Ángela Merkel para rectificar y de llevarse por delante al partido en su hundimiento.

El ala dura de la CDU se autodenomima «Círculo de Berlín«. Sus miembros afirman que la CDU solo podrá recobrar a los electores que se le fueron para apoyar al partido AfD (Alternativa para Alemania) si pone en marcha una clara política conservadora y demandaron una rectificación de la política de Merkel. Hechos y no palabras retóricas.

El portavoz de ese grupo al interior de la CDU, Christean Wagner, declaró que en el marco de esa política más conservadora se deben establecer «zonas de tránsito» en las fronteras de Alemania. Son centros donde se retendrá a los refugiados mientras se decide a la brevedad posible si se la va a abrir juicio de asilo o si es deportado de inmediato.

En esas «zonas de tránsito» no serán consideradas como territorio alemán sino como una especie de campo neutro mientras se decide el siguiente destino del solicitante de asilo. Además ese círculo pidió que se restrinja el derecho de los refugiados a traer a Alemania a su familia, en caso de que reciban el derecho de asilo.

En Alemania ya hay zonas de tránsito en los aeropuertos de Munich, de Frankfurt, Düsseldorf, Hamburgo y Berlín, donde se concentra a los solicitantes de asilo que vienen de «países seguros» mientras que la Oficina Federal de Migración y Solicitantes de Asilo decide si son regresados a sus países o si se les abre juicio de asilo político.

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La legisladora por Sajonia del partido de Merkel, Veronika Bellmann, se quejó de que la canciller federal nunca sometió a votación sus posiciones sobre la crisis de refugiados sino que el estilo de Merkel de liderar «se volvió presidencialista» y las decisiones las tomó sola.

Hizo referencia a que Merkel es alemana oriental y que en la ex República Democrática de Alemania (ex RDA) había una censura estatal, y ahora hay «una policía de las opiniones políticas» en la sociedad.

Afirmó que eso es notorio tanto en la sociedad como en los medios de comunicación y que la tolerancia ha disminuido, ya que cualquier alemán que está por la identidad nacional, por la supremacía de la cultura alemana y del patriotismo, enseguida es calificado de populista de derecha.