José Manuel Molina, exalcalde de Toledo (durante doce años), expresidente del PP de Castilla-La Mancha, está imputado por la supuesta mordida de 200.000 euros para la campaña electoral de María Dolores de Cospedal, que Sacyr pagó a cambio de la concesión de la contrata de basuras del ayuntamiento de Toledo.
Fue también denunciado por su cuñado acusándole de haber falsificado la firma de un documento que le sirvió para desviar a su favor una subvención pública de la Junta de Castilla-La Mancha. La ayuda, de 257.000 euros, se habría destinado a solventar los problemas económicos de un negocio familiar de jardinería.
Molina, que practica excentricidades como vestirse de almirante en sus vacaciones mallorquinas a bordo de los yates que alquilaba, fue premiado por sus servicios al partido con un concurso preparado para el puesto de canciller en la Embajada española en la República Democrática del Congo. Un puesto de carácter gestor y administrativo, muy bien retribuido. Molina pertenece al partido que junto con Ciudadanos ha firmado un pacto anticorrupción. La mafia enviaba a sus miembros ‘quemados’ a Sicilia. Molina vive en Kinsasa desde marzo de 2014.