AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños

La Virgen de Civitavechia llora lágrimas de sangre por la gran apostasía y la batalla satánica contra la familia y la vida

Redacción




Enrique de Diego.

La Virgen llora sangre. Es tal su sufrimiento por el despeñarse de la Iglesia y el mundo en una abrumadora apostasía, por el sufrimiento de sus hijos al alejarse de Dios y caer en las redes de satán. Hay una concatenación en las imágenes de la Virgen con las que se producen las apariciones: en Akita la monja japonesa está en oración ante la imagen de Nuestra Señora de los Pueblos de Amsterdam y en Civitavechia, la diócesis más pequeña de Italia, las lágrimas de María y sus mensajes se producen ante una reproducción de la Reina de la Paz de Medjugorje, que les fue regalada por el párroco Pablo Martín, un español, a la familia Gregori. Esta Virgen de yeso fue puesta, con profundo cariño, en el jardín de la casa, la Iglesia doméstica, semejando una gruta.

La pequeña Jessica ante la Virgen.

El 2 de febrero, de 1995, cuando la familia se preparaba para ir a Misa, la niña de cinco años ven que tarda. De repente viene muy emocionada diciendo que la Virgen lloraba… sangre.  Los padres no lo creían y no podían comprender.  Pero al ir a verla vieron la sangre que corría por las mejillas de la estatua. ¿Por qué llora nuestra Madre y lágrimas de sangre? “Queridos hijos, lloro porque no me escucháis, no me creéis y no me aceptáis.” La Virgen se desgañita, se aparece una y otra vez y no le hacemos caso. Siente predilección en utilizar como mensajeros a los niños. Los tres niños santos de Fátima, Santa Bernardette de Lourdes, los cuatro niñas de San Esteban de Garabandal, las tres jóvenes tutsis de Kubeho, los cinco adolescentes de Medjugorje y aquí, en Civitavechia elige una niña de cinco años, Jessica, como primer testigo de su mensaje angustiado de sanación. Porque los niños, en su inocencia, no mienten, dicen la verdad tal como la ven, sin artificios. La Virgen podría aparecerse a un gran filósofo o a una reunión de influyentes hombres de empresa, pero esa no es la lógica de Dios que se ofrece a las almas sencillas. En Civitavechia es a una familia porque para destruir la Iglesia y el mundo satán precisa destruir antes a la familia.

La estatua de la Virgen de yeso llora trece veces, su Sangre y la de su divino Hijo. Lloran los dos por nuestros pecados, por nuestras infidelidades y por la apostasía de tantos, también eclesiásticos. Entre ese 2 de febrero de 1995 y el 6 de febrero de 1995. Y el 6 de marzo en brazos de Girolomo Grillo, el obispo de la diócesis, que acude incrédulo dispuesto a atajar la superchería y se encuentra con la sorpresa de que cuando tiene la imagen en sus brazos la Virgen llora las lágrimas de sangre y de dolor por una Iglesia que está a punto de sucumbir y una Humanidad que se aproxima a su naufragio. En el segundo aniversario de la lacrimación Monseñor Grillo dijo: «Es un evento racionalmente inexplicable. Es claro que ha sucedido algo de irracional entre mis manos. Me haré matar pero repetiré siempre lo que vi y lo que sucedió entre mis manos»

NO TE LO PIERDAS:   Estos son los 10 libros que debes leer para combatir al Nuevo Orden Mundial

La Virgen en Civitavecchia lloraría sangre de su Hijo (los análisis y contraanálisis revelan que el líquido rojizo retirado de la virgen es sangre humana con características masculinas y femeninas, con preponderancia de las primeras). La estatua fue sometida a varios estudios de laboratorio y no encontraron la razón de las lágrimas. Pudieron constatar que la sangre es de un ser humano. En algunas pruebas indica ser sangre de mujer, en otras de hombre. Todos los hombres de la familia fueron sometidos a prueba. La sangre no venía de ninguno de ellos.

Desde 1996, una segunda imagen de la Virgen, idéntica a la anterior, regalada a los Gregori por el cardenal Andrzej Maria Deskur -muy amigo del papa Wojtyla– cuando la justicia italiana, en abril de 1995, tuvo bajo embargo a la virgencita durante algún tiempo, emanó un óleo perfumado, no presente en la naturaleza, en los días de las fiestas litúrgicas, y siempre más a menudo en presencia de gente que oraba.

En base al protocolo tradicional de la Iglesia, el caso fue estudiado inmediatamente por la Comisión teológica diocesana, formada por 11 miembros entre los cuales se encontraban expertos de gran importancia (como el padre Stefano Fiores del Marianum y en un primer momento también el padre René Laurentin); al final la mayoría se pronunció a favor de la sobrenaturalidad del acontecimiento.

Diez años después, el 15 de marzo de 2005, con un decreto del obispo Grillo, la parroquia que custodia la estatua de las lágrimas de sangre fue elevada a santuario.

Los mensajes, recibidos y escritos en 1995, son de tremenda actualidad. Destaca en ellos la preocupación por la Iglesia de Cristo, cuando la oscuridad está cayendo sobre la Roca de Pedro, que debería ser luz y no tinieblas. “En Roma las tinieblas están bajando cada vez más sobre la Roca que mi Hijo Jesús os ha dejado para edificar, educar y formar espiritualmente a sus hijos. Obispos: vuestra tarea es la de continuar el crecimiento de la Iglesia de Dios, siendo vosotros los herederos de Dios. Volved a ser un solo corazón lleno de verdadera fe y de unidad con mi hijo Juan Pablo II, el más grande don que mi Corazón Inmaculado haya obtenido del Corazón de Jesús”

Es la “primavera católica” satánica de John Potesta e Hillary Clinton que cataliza en el infame Bergoglio, el ‘Papa Rotchschild”, como le llama el actor Jim Caviezel, el inolvidable y magnífico intérprete de Nuestro Señor en “La Pasión” de Mel Gibson. La Virgen profetiza el intento de destrucción de la Iglesia: “Satanás se está apoderando de toda la humanidad, y ahora está intentando destruir la Iglesia de Dios, ¡no lo permitáis!”. Porque “el Camino de la Verdad está en la Iglesia de Dios. La Verdad viene de Dios. No temas al hombre, teme a Dios”. El temor a Dios que da fortaleza, que hace no temer el juicio de los hombres, puesto por montera.

NO TE LO PIERDAS:   Goebbels toma el mando en Elda
El patriarca Gregori.

“Satanás es poderoso y quiere desencadenar el odio, es decir, la guerra para destruir a la humanidad. Y para alcanzar este objetivo quiere derribar la Iglesia de Dios, comenzando con la pequeña iglesia doméstica que es la familia”, dijo el vidente Fabio Gregori, papá de la pequeña Jessica.

Gregori subraya que, durante las apariciones, la Virgen dijo que “sin una nueva conversión, muchos pastores podrían haber traicionado su vocación, incluso con graves escándalos, y que la Iglesia habría conocido una nueva gran apostasía, es decir, renegar de las verdades cristianas fundamentales reafirmadas durante los siglos por la tradición y la doctrina”. Recordemos el “muchos sacerdotes, obispos y cardenales van por el camino de la perdición”, de Garabandal; en Civitavechia la apostasía es patente y se da en la misma cabeza, en el infame apóstata modernista Jorge Bergoglio.

Por eso, “alrededor de la familia y la vida se lleva a cabo la batalla contra la dignidad divina del hombre”. La destrucción de esta unidad llega al culmine cuando la comunión conyugal no es reconocida en la “necesaria diversidad y complementariedad sexual”.

Es esa guerra por el espíritu de la que habla la Virgen en Amsterdam. Es una ‘guerra satánica” como la ha definido en estos días el Cardenal Sarah: “El hombre moderno ha iniciado una terrible guerra contra Dios y contra el hombre: una guerra satánica. Es por esto que la batalla espiritual con el mal es parte de la vida cristiana”. Pero la vida interior exige lucha. “La lucha actual, y de todos los días, se da en los corazones y es como dice San Pablo, contra los espíritus del mal. Los demonios buscan a toda costa mi ruina y mi alejamiento de Dios”, advirtió Sarah. “Es imperativo hoy disciplinar la mente y el corazón clavando la mirada en la Cruz”.

El Cardenal Sarah señaló que el “ser humano lucha por proteger la naturaleza, pero al mismo tiempo destruye al hombre, el matrimonio, la vida y rechaza aceptando su propia identidad de hombre o de mujer”. “Dios nos ha creado hombre o mujer y hoy decimos que cada uno puede elegir si ser hombre o mujer”.

Mas la reacción sanadora y liberadora, una rebelión que surge de lo más profundo del pueblo, desasistido por sus pastores. En Estados Unidos, la Corte Suprema ha declarado que el aborto no es un derecho y numerosos estados lo han prohibido o restringido, esos mismos estados están penalizando las mutilaciones para cambiar de sexo y las empresas satánicas de adoctrinamiento, como Disney y Netflix, lo único que ganan es el rechazo de la gente que se moviliza en defensa de sus familias y del orden natural. El mensaje más importante y alentador es que al final Ella ganará, Cristo vencerá y nosotros, la milicia de San Miguel, ganaremos con ellos si somos fieles y leales a Cristo.