
Enrique de Diego.
Quienes han estado, de manera ejemplar, a la altura de las circunstancias han sido los miembros de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía. Total apoyo y fuerte aplauso. Solicito a los cada vez más numerosos lectores de Rambla Libre que no se dejen confundir por la estrategia de la propaganda. Cuando se pretende perpetrar un delito es preciso actuar con la violencia legítima. Los miembros de la Guardia Civil y de la Policía Nacional han demostrado arrestos, profesionalidad y templanza. De la proporcionalidad utilizada da muestras el hecho de que ha habido tres detenidos. Las cifras de heridos, que se elevan a 465, están claramente infladas y en la mayoría de los casos se trata de rasguños o contusiones sin importancia. El único responsable de lo sucedido -y de lo que pueda suceder de ahora en adelante- es Carles Puigdemont.
https://youtu.be/GKFPS3j_Z-w
Tenemos unas Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que se cuentan entre los mejores del mundo, sino los mejores. Han tenido que actuar salvando una situación que se iba de las manos, por la manifiesta incompetencia de Mariano Rajoy y su Gobierno de débiles e inútiles. No hay equidistancia, se equivoca de medio a medio Miquel Iceta, insisto en que el culpable es Carles Puigdemont, que debería ser detenido de inmediato. El Gobierno se ha empeñado en mantener algunas ficciones que han pasado factura, y que los miembros de los cuerpos policiales han conseguido solventar.
No hay precedentes en los anales de un golpe de Estado en el que se trata de impedir sin detener al jefe y a su estado mayor y se le deja al frente del poder e incluso de fuerza armada.
Mariano Rajoy, Soraya Saénz de Santamaría y el Gobierno de incompetentes parecen haber sido los únicos que han mantenido una confianza ciega, contra toda lógica, en que los mossos actuarían como Policía Judicial, obedecerían a los jueces y se encargarían de impedir el referéndum farsa. Los mossos han actuado, bajo el mando del felón Josep Lluís Trapero, como mentirosos y traidores, obligando a la actuación de la Guardia Civil y la Policía Nacional. Incluso se han producido graves incidentes en los que mossos han intentado dificultad la labor policial.
Hay seis investigaciones judiciales abiertas por desobediencia de los mossos que individual y colectivamente se han situado fuera de la Ley y del Estado de Derecho.
Cabe decir de nuestros Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado aquello del Cid de que buenos vasallos, si tuvieran buen señor. Se les ha hecho actuar con todos los frentes abiertos, con la previsible traición alevosa de los mossos y con confusión en los medios para alcanzar el objetivo, pues hace tiempo que se debía haber detenido a Carles Puigdemont.
Han actuado como fuerzas de liberación frente a un proceso claramente totalitario, que va contra la integridad territorial de España y que pretende el exterminio civil de media Cataluña.
Guardias civiles y policías nacionales han cumplido con su misión y lo han hecho con gran profesionalidad. Todo el apoyo y el más cerrado aplauso. Sois, hoy, lo mejor de España, su pilar.