
Redacción.
En declaraciones a Ikusle, el polémico periodista Enrique de Diego considera que el proceso soberanista catalán “no es ya una intentona golpista, sino que es un abierta fase revolucionaria que puede desembocar en una guerra civil”. “Los alcaldes y funcionarios están desprotegidos y sometidos al riesgo de la presión callejera y hay posibilidad de que ellos y sus familias sufran ataques violentos: esto no ha hecho más que empezar”, añade.
En opinión del director de Rambla Libre, considerado como el diario digital de referencia para la derecha radical española, “el Estado ha cometido muchos errores en el pasado respecto a Cataluña, pero el más reciente es haber evitado sistemáticamente la quiebra de la Generalitat con dinero del Fondo de Liquidez Autonómica, en vez de pasar a hacer depender a los funcionarios del Gobierno de la nación, porque quien paga manda”.
En cuanto al ejecutivo presidido por Mariano Rajoy, Enrique de Diego considera que “está permitiendo la comisión de gravísimos delitos en la más absoluta impunidad”. “Se ha pasado del delito de sedición al de rebelión y se ha iniciado un proceso revolucionario de consecuencias inciertas, pero previsiblemente nefastas, por tanto, y dejando de decir que nadie está por encima de la ley y haciendo que eso sea verdad, deben aplicarse los artículos 472 y 544 del código penal”, señala.
“Ahora mismo el miserable Carles Puigdemont y sus compinches de gobierno deberían haber sido detenidos y lo mismo la presidenta del Parlamento catalán y los diputados en rebeldía. Se debería haber aplicado de inmediato, y desde hace mucho tiempo, el artículo 155 de la Constitución”, asevera el ex-periodista de Intereconomía.
De Diego prosigue indicando que “una cuestión importante es con qué fuerzas, dentro del monopolio de la violencia del Estado, cuenta sobre el terreno el ejecutivo para imponer la ley y reducir a los golpistas revolucionarios”. “La idea de que los Mossos sean quienes se atengan a la legalidad es de altísimo riesgo y deberían haberse movido ya tropas del Ejército hacia Cataluña”, asegura.
Por último, Enrique de Diego considera que “las revoluciones las hacen los sans coulottes y no los que veranean en Sitges, ciertamente, y puede que una parte del separatismo moderado abandone a sus cabecillas, pero las revoluciones se sabe cómo empiezan pero no cuándo y cómo acaban”. “La experiencia histórica demuestra que devoran a quienes las ponen en marcha y terminan en baños de sangre cuando se las afronta con debilidad, como está haciendo Rajoy”, concluye.