Virginia Montes.
Nigel Farage está haciendo historia en el Reino Unido. Después de ser uno de los principales artífices del Brexit, en las últimas elecciones obtuvo su escaño rompiedo el bipartidismo entre torys y laboristas en el Reino Unido y consiguió otros cuatro escaños, sin dinero, en lo que calificó como «mi pequeña Armada».
Con su partido, consigue la tercera posicióncon el 22% pisando los talones al partido laborista, con el 25%, hundido por su wokismo y los escándalos de corrupción del todavía primer ministro Deir Stamer, quien tiene una cota de popularidad ínfima, está entregado a los islamistas, y ha conseguido que una iniciativa popular para destituirle haya conseguido 2.000.000 de firmas en sólo 40 horas.