Enrique de Diego.
Las comparaciones son odiosas y está más que ninguna: Novak Djokovic está fresco como un lechuga, es el campeón olímpico, mientras tú Rafa Nadal, o mejor Rafa Fatal, estás alopécico y envejecido, te has echado años encima.
El uno es un héroe de la Humanidad por su coraje al no timo vacunarse, contra viento y marea, mientras tú caiste en la trampa vil que te tendió tu amigacho Bill Gates y te dedicaste coomo una furcia de las farmacéuticas a promocionar el veneno letal, especialmente a los inocentes niños, junto con Pau Gasol, que no es más tonto porque no es más alto.
No sirve de nada sobresalir en un deporte, si te hundes como ser humano. Eso te pasa a ti, Rafa Fatal, que no das lka talla, que empequeñeces hasta convertirte en una ameba ponzoñosa. Ahora no termina tu agonía, esa que nos tienes acostumbrados para cumplir tus contratos con los patrocinadores, tus retiradas por lesión de los torneos, ahora empieza la auténtoica agonía, cuando la proteína Spike te va corroyendo el cuerpo, el cerebro, que nunca lo has cultivado, pedazo de carne con ojos, tu pelo, que se te cae a mechones, tus piernas, que ya no te sostienen, a tus 38 años. que las normas, cuando son injustas, están para saltárselas, si no no eres más que un sargento chusquero de las SS.
Estoy para cantarte un Miserere y hacerte un Requiem. Aquí yace Rafa Nadal, siempre cumplió las normas, fue amigacho de Bill Gates, el mayor tarado genocida que ha visto la Humanidad. Rafa Fatal, cómplice del mal absoluto.
Quizás te guste como epitafio más la égloga de un villano como Juan Carlos @nanosecso. Ahí va el pelota mayor del reino:
