Virginia Montes, enviada especial.
Alternativa para Alemania pisa el acelerador y navega a velocidad de crucero. En la propagnda ha bautizado este vercano como el de los acuchillamientos. Después de su rotunda victoria en Turingia y su segunda posición en Sajonia, aspira a revalidar resultados el 22 de septiembre de 2024 en Brandeburgo.
Mientras tanto, la última moda en Alemania es miles de jóvenes alemanas haciendo llamamientos en Tiktok al voto por Alternativa por Alemania, hartas de pasar miedo y de ser violadas por inmigrastes irregulares mantenidos por el Estado alemán. Es una lucha victoriosa contra la casta parasitaria alemana y los medios de omunicación tradicionales, que han traicionado al pueblo alemán y se han alineado con el globalismo perverso y genocida.
No hay ningún problema con el calentamiento global como cacarean la CDU, el SPD, los Verdes y los infames Liberales. Sí hay un problema muy serio con los acuchillamientos que están protaagonizados por musulmanes que son mantenidos por el Estado y que salen a perpetrar sus fechorías de albergues para asilados. El colmo.
Dos acuchillamientos han tenido más relevancia y han impactado más en la opinión pública alemana. El 30 de mayo un afgano de 25 años se lio a cuchilladas contra los asistentes a un mitín del grupo patriótico Pax Europa. La empredió con el líder de Pax Europa, Michael Stürzenberger, que resultó herido. Otros cuatro fueron heridos. Tuvo lugar una escena extraña. Un policía se dedicó a interceptar y bloquear a un militante de Pax Europa, como si fuera realmente el agresor, como si el peligro, como tantas veces se ha dicho, se les ha dicho a la policía, viniera de los que son calificados de extrema derecha.
En ese momento, cuando trataba de inmovilizar al alemán, el afgano le asestó dos cuchilladasen la cabeza y el cuello, por la espalda. Nada se pudo hacer por salvarle la vida y tras estar en coma inducido el policía murió el 2 de junio de 2024, sin ser consciente de su estupidez que es la estupidez de toda la clase política.
El 24 de agosto de 2024, un musulmán sirio de 26 años, que se tomó en serio su lectura coránica que le manda «matadlos a todos allá donde los encontréis», la emprendió en Solingen, en la Plaza del Mercado, donde se celebraba, en un despiste monumental, «el festival de la diversidad», con la multitud, con el resultado de 3 alemanes muertos y 10 heridos, 4 de ellos graves. El asesino había recibido y disfrutaba de un permiso de protección subsidiaria concedido en 2022. Es decir, llevaba dos años viviendo de los contribuyentes a los que odiaba indiscrinadamente. Vivía en un albergue para refugiados de mamá Merkel.
Los alemanes han sido los que más menturas han soportado de su clase política. Primero, se especuló con que los atentados fueron desarrollados por la extrema derecha, luego se les vendió que eran casos aislados y después que eran la consecuencia de personas con trastornos mentales, cuando todos son musulmanes.
Es la rebelión de esas jóvenes alemanas anunciando su intención de votar a Alternativa para Alemania, sacudiéndose la asfixiante y ridícula dictadura intelectual woke. Al fin y al cabo, las mujeres han votado mayoritariamente en Turingia por Alternativa para Alemania, el partido realmente que representa mejor el feminismo.
Alternativa para Alemania arrasó en Turingia especialmente entre los jóvenes