Enrique de Diego.
Ese pedazo de redactor que es Luis Bru me reta en su articulo sobre Losantos que va enlazando timo vacunación tras timo vacunación con catarro tras catarro y señala que «uno sospecha que la decisión de nuestro editor, Enrique de Diego de votar a Vox en las elecciones europeas es por hundir a Losantos». Hombre, no, mi voto táctico a Vox en las elecciones europeas que tendrá lugar el 9 de junio tiene mil motivos. Por ejemplo, encarcelar a la bruja Ursula von der Leyen por sus corruptos, y genocidas, contratos con Pfizer por el que se compró 100 dosis por cada europeo. Ursula, que dejará el cargo ese mismo mes de mayo, es tan corrupta, tan ultra corrupta, que negoció los contratos por watsapp con Albert Borula, CEO de Pfizer, y no ha entregado el móvil en aras de la transparencia. Los de Vox tendrán que responder de sus actos y de seguro Juan Luis Steegmann no saldrá muy bien parado.
Está, por ejemplo, frenar la invasión planificada para la sustitución de los autóctonos a través de una guerra civil cruenta, ya muy cercana, que sólo se podrá parar si llega una mayoría abrumadora de extrema derecha al Parlamento europeo y quedan en proceso de extinción socialdemócratas y conservadores, que son las dos caras de la misma moneda globalista; es decir, una escoria putrefacta que precisan urgentemente desaparecer por el sumidero de la historia. No sólo parar, sino revertir esa peligrosa invasión. También fenómenos estrechamente ligados como la ocupación de casas o el incremento de la inseguridad mediante delitos de odio a los autóctonos, y delitos de orden sexual como las violaciones en manadas o en jaurías.
Luego está la estupidez woke que contradice el sentido común y que nos degrada como sociedad hasta llevarnos a la extinción, que se plasma en el adoctrinamiento de los niños en esas guarradas, para favorecer la pedofilia y quitar la inocencia de los niños, para hacerles víctimas propiciatorias de auténticos y escalofriantes sacrificios humanos. Ese delirio woke asumido por inútiles salidos de las facultades de las mal llamadas ciencias sociales que no tiene colocación en el mercado y por no pegar un palo al agua, dicen chorradas muy peligrosas para nuestra sociedad y ha llegado el momento de pararlos y mandarlos por donde amagan los pepinos.
Son todas estas magníficas razones, determinantes, para votar a Vox, que sale a esta contienda en un desmerecido tercer lugar, a punto de sucumbir su oficina de colocación, con todos los vicios del sistema, y que si gana abrumadoramente será una sorpresa para esos pozos de mierda que son el PSOE y el PP y Sumar. Las europeas tienen la enorme ventaja de que son de circunscripción nacional, donde los separatistas no mandan, donde los sueños húmedos de Pedro Sánchez de romper la unidad de España al dictado de sus apoyos separatistas, pueden recibir un enorme voto de castigo que sitúe al PSOE en proceso de extinción y su primo hermano la escoria del PP de Alberto Núñez Feijoó a las puertas del abismo y paguen, además, el fervor por las mascarillas de Carlos Mazón. Y a cada separatista en su nicho de mierda y a Bildu en su pocilga, porque en las europeas todos los votos cuentan, los de Soria y Teruel, por citar dos ejemplo.
Pero, como respeto mucho el buen juicio de Luis Bru he dado en pensar si en mi inconsciente y esas paparruchas freudianas, a las que Federico es adicto, su podría haber alguna razón para votar a Vox en las europeas, como cuestión táctica, contra Losantos, para que muerda el polvo, para terminar de hundirle. Hago examen de conciencia y compruebo que Luis Bru no anda descaminado. Como no desvarían los que ven las referencias del gran César Vidal a las furcias mediáticas una referencia a un biotipo en el que cuadra Losantos. En ese sentido, y para dar condición de categoría lo que es una anécdota, hay que considerar que Losantos es el perfecto apologeta del bipartidismo rampante de cloaca y que propugna la extinción de Vox con el mismo fervor con que pretendía exterminarnos a los no vacunados tildándonos de bebelejías, cucarachas, ratas y asesinos, y a las cucarachas, lo sabían hasta los locutores hutus del genocidio ruandés. Así que me basta esa poderosa razón para votar a Vox en las europeas; por la poderosa razón de que a Losantos no le gusta Vox, porque su ruin argumento del voto útil no vale una mierda en las europeas- Vox será el yunque que aplastará al pivot de Orihuela del Tremedal.